Ojana in Excelsis

La falsa superioridad intelectual de los que no ven Sálvame

Había una corriente que se creía superior moral e intelectualmente al resto por no ver este programa

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Juanmi Vega @Juanmivegar
30 abr 2020 / 05:00 h - Actualizado: 30 abr 2020 / 05:00 h.
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  • Colaboradores del programa Sálvame, de Telecinco. / El Correo
    Colaboradores del programa Sálvame, de Telecinco. / El Correo

La semana pasada nos trajo el culebrón del coronavirus. Ríase usted de ‘Pasión de Gavilanes’. Hemos asistido a una ‘Pasión de confinados’ sin quererlo ni beberlo.

Para el que no lo sepa, todo se inició en un falso directo de Youtube en el que se entrevistaba al periodista Alfonso Merlos, muy crítico con la línea del gobierno. Durante su intervención, se pudo ver a una mujer pasear al fondo de la imagen. Todo hubiese quedado en una simple anécdota si no se tuviera en cuenta que Merlos mantenía una relación sentimental con la ex participante de Gran Hermano Marta López.

Las redes y los artículos de opinión estallaron ante el comportamiento de Merlos. A medida que pasaban las horas y que cada vez se sabía más del caso, quedaba claro que la casa del periodista parecía estar en la fase 4 de la ‘desescalada’, y podía recibir visitas. Eso de predicar con el ejemplo no iba con el periodista.

El programa de Telecinco Sálvame le dedicó horas y horas. Lo más curioso es la de gente que comentó el programa del sábado por la noche. Muchas de estas personas eran las que lo criticaban imperiosamente, algunos hasta pidiendo el cierre del mismo.

Había una corriente que se creía superior moral e intelectualmente al resto por no ver este programa. Esos intelectuales fueron los primeros que iban comentando, minuto a minuto, el programa.

Si decías en público que veías Sálvame... ya saben lo que ocurría.

Hablar de los amores de la Pantoja, de un ex concursante de Supervivientes o de las infidelidades de los participantes de la Isla de las Tentaciones es de bajo nivel, pero tragarse las 4 horas diarias de programa para saber la historia de Alfonso Merlos y su affaire con la también compañera Alexia Rivas es de ser un intelectual.

El caso Merlos está desenmascarando a muchísima gente. A los que querían el fin del programa y ahora están pegados a la tele una vez terminado de comerse la manzana, y al que pedía la dimisión del Gobierno por lo mal que estaba llevando la crisis del coronavirus mientras él recibía visitas en su casa.

Había más analistas siguiendo el debate de Sálvame el sábado por la noche que la tertulia política de la Sexta Noche.

Incluso he llegado a ver a esos críticos, mandar mensajes alabando la labor de Jorge Javier Vázquez. Personalmente, creo que J.J. Vázquez es uno de los mejores comunicadores televisivos que tenemos en el panorama nacional. Todo lo que toca triunfa y sabe mantener un ritmo frenético.

Sólo espero que esta situación sirva para no prejuzgar a la gente por sus gustos y preferencias, ni creerse mejor o peor persona. Cuántas veces habremos escuchado eso de “tú no sabes de cine porque te gustan los Transformers y no has visto la última del director iraní de culto”. Que cada uno use su tiempo libre en lo que quiera y en lo que le guste, eso sí, sin ir a casa de nadie, al menos, hasta que lleguemos a la fase 4 y terminemos con el jefe final. Entonces nos habremos pasado el juego.