El Mago de Oz siempre fue una de mis pelis favoritas cuando era niña, eso de ver casas volando por los aires, brujas malvadas aplastadas, hadas que te ayudaban en tu empeño, transportarte a nuevos y alucinantes mundos y ¡magia! sobre todo, mucha magia... ¡Eso me encantaba! ¿Recuerdas la frase mágica que decía Dorothy al tiempo que chocaba, uno contra otro, sus zapatos rojos? «¡No hay nada como el hogar!», cuánta razón...
¿Qué es el hogar?
Una pista, aunque pueda parecerte lo mismo, un hogar va mucho más allá del concepto «casa»... El hogar es un concepto que trasciende la realidad física y se envuelve de un inevitable halo emocional y mental... Quizás, lo que Dorothy descubrió al final de su aventura es que «el hogar» lo había «llevado puesto» todo el rato, pues, como bien advertía Rainer María Rilke: «la única patria que tiene el hombre es su infancia».
El verdadero hogar es aquel en el que habita nuestro corazón y ¿acaso alguien duda que la infancia es la artesana de la ilusión? es precisamente cuando somos niños cuando la curiosidad, la pasión, el experimento, el cariño... ¡Se vuelven nuestros imprescindibles compañeros de viaje! La buena educación en la infancia (entiéndase el término «educación» en su más completa acepción: intelectual, emocional, física, espiritual) dará a luz en la vida adulta a una nutrida visión, a acciones que aporten valor, a la creatividad que te alimente la mente desde el verano hasta Navidad, a ilusiones y esperanzas que harán de tu existencia un valor en alza...
De mayor quiero ser...
¿Te acuerdas de aquella repetida cuestión que te hacían tus padres de pequeño? «¿Qué quieres ser de mayor?» Pues bien, si te la hicieran ahora, ¿qué responderías? Parafrasaeando al novelista estadounidense Josep Heller, yo contestaría: «He llegado por fin a lo que quería ser de mayor: un niño», lo reconozco, soy una profunda admiradora del mundo infantil, estoy convencida de que el origen de la verdad, de la belleza, de la bondad y del hogar se encuentran en el maravilloso corazón infantil...
¡Un parque que se transforma en hogar!
No, no es la continuación de la peli «Transformers», ¡es una realidad! Veréis, durante 3 días he tenido la fortuna de formar parte de la iniciativa navideña de la Diputación de Huelva, dando vida al Parque Celestino Mutis con la historia de «Komache» (Editorial BABIDI-BÚ), mi libro de literatura infantil. Durante esos 3 maravillosos días, he combinado el cuento de «Komache» con algunos de los personajes que por allí estaban: el Gato con Botas, el Patito Feo, el Lobo y los 3 Cerditos... Cada día, en doble sesión de mañana y tarde, ¡ha habido una media de 1000 personas! sí, el aforo se llenaba pero no tanto como mi corazón: de agradecimiento, alegría, ilusión, satisfacción...
Cada noche, al llegar a mi casa, dedicaba un rato a responder los entusiasmantes correos electrónicos de las familias que me enviaban los maravillosos dibujos y manualidades que sus hijos habían hecho con tanto cariño sobre Komache, cada uno con su historia pero todos compartían la buena energía que se había creado durante el cuentacuentos... Así, con el ánimo más que contento, me dí cuenta que el Parque Celestino Mutis, ¡también se había transformado en mi hogar! pues hogar es lo que te hace feliz y, sin duda, yo lo he sido allí... Muchas gracias Ana, María, Javier, Julia, «Dinosaurio Valerio», «Conejita Noelia», Rocío, Martina y a toooodos los niños que me habéis hecho sentir una más de la pandilla, con vosotros... ¡He descubierto la maravilla de la maravilla! (un corazón de chiquilla).