La Tostá

Nada menos que 35 años

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Manuel Bohórquez @BohorquezCas
30 sep 2019 / 08:16 h - Actualizado: 30 sep 2019 / 08:25 h.
"La Tostá","120 años de El Correo de Andalucía"
  • Manuel Bohórquez./ El Correo
    Manuel Bohórquez./ El Correo

Aunque a nadie le importe, llevo 35 años en El Correo de Andalucía. Sí, para mí sigue siendo El Correo, aunque no se venda en los kioscos. Me jode que algunos ex compañeros digan que este diario ya no existe, porque existe y sigue siendo el preferido de decenas de miles de sevillanos y sevillanas. Y ya, desde que se hizo digital, es leído en todo el mundo. La única vez que fui a Nueva York, de lo que hace ya algunos años, un señor me esperó en la puerta de un teatro para que le firmara cinco ejemplares del decano de la prensa sevillana. Cuando entré en el periódico como colaborador sin derecho a estipendio alguno, el director era el padre José María Javierre. Un día me vio en la garita de entrada entregando un sobre con un artículo, y me preguntó que quién era: “Soy Manolo Bohórquez, el de flamenco”. Le dije. Y me invitó a entrar en la redacción para ver cómo se trabajaba y también para que viera la rotativa, que estaba imprimiendo un suplemento. Cuando salí a la calle, aquel día supe que jamás escribiría en otro periódico que no fuera El Correo de Andalucía. Ya ha llovido, y aquí sigo. Si aguanto el tirón, que creo que sí, me jubilaré con cuarenta años en la empresa, aunque de colaborador. Ser colaborador te da una enorme independencia porque no te debes a disciplina alguna. Ah, lo siento, soy colaborador. ¿Puedes entrevistar a la Niña Pastori? No, lo siento, que la entrevisten en su tierra. Yo soy más de la Niña Pastora, o sea, de Pastora la de los Peines. ¿Puedes ir mañana a la presentación del último disco de José Mercé, Con fi de fua? No, que vaya el crítico de gastronomía, porque mañana he quedado para tomar unos mostos con Manuel Márquez El Zapatero en Villanueva del Ariscal, su pueblo. Los colaboradores somos así de chulos. Tenía 26 años cuando escribí la primera vez un artículo en El Correo, La juventud en el flamenco. No era periodista, sino albañil, pero le echaba cara. Tenía faltas de ortografía y me daba vergüenza, pero le echaba morros. Burro no es con uve, chaval. Qué más daba si era con uve o con be, si en mi barrio, Palmete, tampoco es que leyeran a Unamuno. Cuánta paciencia tuvieron conmigo Carmen Carballo, Antonio Lorca, Paquita Godoy o Mariló Gálvez. Y directores como Manuel Gómez Cardeña, Vicente Clavero, Fernando Orgambides, Antonio Ramos, Antonio Hernández Rodicio y Óscar Gómez Ortega. Gracias a todos por la confianza. Seguiré echándole morros, qué remedio.