Los medios y los días

¿Quién teme a Macarena Olona?

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25 may 2022 / 04:00 h - Actualizado: 25 may 2022 / 04:00 h.
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  • El líder de Vox, Santiago Abascal, y la portavoz de VOX en el Congreso, Macarena Olona. / E.P.
    El líder de Vox, Santiago Abascal, y la portavoz de VOX en el Congreso, Macarena Olona. / E.P.

Para mí no hay duda de que Macarena Olona no ha debido ir mucho por la casa donde se ha empadronado. Una vida como la de Macarena y la mayoría de los políticos destacados de Las Cortes se vive en Madrid, no en un pueblo de Granada. La ambición política lleva ADN madrileño, lo demás son las zonas donde juega la cantera y a veces ni eso, para estar en un ministerio y además en un puesto de responsabilidad -incluido ministro o ministra- si el partido de turno así lo estima, puedes pasar de estar estudiando en la universidad a la poltrona máxima. Y si deseas ser doctor ya te escribirá un “negro” la tesis o la copia tu secretaria/o de aquí y de allá. Un tribunal de buenos amiguetes del director de la tesis y ya tienes un título nuevo para colgar en la pared, un papel, otra cosa es que sea verdad lo que ese papel dice, por muchos sellos y firmas oficiales que lleve. Pero a efectos oficiales y de vacile es real su contenido, si bien en la universidad ya sabemos quién es quién y la credibilidad académica de unos y otros.

Como conocemos de sobra, el movimiento Andaluces Levantaos, que ya es una candidatura a la presidencia de la Junta, impugnó el empadronamiento de Macarena Olona en Salobreña, donde se empadronó el 5 de noviembre de 2021 en casa del expresidente de su partido en Granada que le dio refugio a la alicantina. La queja de la coalición se basa en argumentos claros. El artículo 15 de la Ley de Bases de Régimen Local determina que quien viva en varios municipios deberá inscribirse únicamente en el que habite durante más tiempo al año. Olona no puede estar en misa en Salobreña y tocando las campanas en Madrid. Imposible, a menos que haya logrado el don de la ubicuidad o la hayan clonado. Afirma además Andaluces Levantaos: «Inscribirse en el censo, pero no ser en realidad vecino o vecina, nos llevaría a una ficción y a un fraude de ley«. La coalición sostiene que la candidata de Vox a la presidencia de la Junta, «no ha sido nunca vecina de Andalucía, cuestión obligatoria para concurrir a las elecciones, como indica la Ley 1/91986, de 2 de enero de 1986 que regula los procesos electorales de Andalucía».

Ahora viene lo que no me gusta nada de este asunto. Reconocen los denunciantes que para ser diputado en el Congreso de los Diputados -como ya lo es Olona, diputada por Granada- no se exige ser vecino de la circunscripción por la que uno se presenta, pero apuntan que «en el caso de elecciones al Parlamento andaluz, la Ley 1/91986, de 2 de enero de 1986 electoral de Andalucía exige, en su art. 4.1, para el ejercicio del sufragio pasivo, que los ciudadanos 'tengan la condición de electores’». Esa misma Ley, prosigue el texto presentado ante la Junta Electoral de Granada, «en su art. 2 nos dice que electores son los que (...) “tengan la condición política de andaluces, conforme al art. 5 del Estatuto de Autonomía’».

El artículo 5 del Estatuto recoge: “A los efectos del presente Estatuto, gozan de la condición política de andaluces o andaluzas, los ciudadanos españoles que, de acuerdo con las leyes generales del Estado, tengan vecindad administrativa en cualquiera de los municipios de Andalucía”. Me echa para atrás el nacionalismo, venga de donde venga. Para ser diputado de España no hay que tener vecindad administrativa. Para ser candidato a la Junta, sí. Se puede vivir en Andalucía y no tener ni puñetera idea de Andalucía y se puede estar a miles de kilómetros y sin embargo estar al día de lo que pasa en esta tierra. ¿Adónde le llegan las comunicaciones del IBI o cuál es el domicilio fiscal de Macarena? ¿Dónde tiene el médico de la SS? ¿Dónde le llegan las multas de tráfico? ¿Adónde le llegan las cartas que nos envía la Junta para que nos hagamos revisiones de colon y otras? ¿Todo está en Salobreña? Entonces no hay duda. De lo contrario, tampoco habría duda.

Pero todo eso es lo de menos. Lo importante es que una formación de izquierdas como la coalición mentada tiene miedo de Olona y le está haciendo el trabajo al presidente Bonilla al tiempo que está elevando a Macarena al rango de mártir andaluza de adopción. De modo que mucho andalucismo por sí, para España y la Humanidad, mucho Andalucía, crisol de culturas, y ahora mirando dónde vive Macarena. Esta mujer tiene tirón y agallas, habla bien, se defiende de maravilla en Las Cortes, no tiene complejos de ser lo que es, una transgresora en el contexto actual, se ha ido a Euskadi a decirles en plena calle a los separatistas que ella es española y el País Vasco es España. Y ahora le piden pureza de sangre y los que se la piden se quejan de que los otros partidos están callados y sólo ellos defienden Andalucía. Si tan seguros están de sí mismos, bajen a la arena y despachen dialécticamente a Olona, que vuelva a Madrid por voluntad de los andaluces, no de la burocracia.

Fin de la historia. La Junta Electoral no ha querido complicarse la vida y ha tirado de hechos puros y de la constitución, sin más complicaciones, que las hay. ¿Si llega a ser la Junta Electoral de Barcelona hubiera pasado lo mismo? Andaluces levantaos aún no se rinde: su primer gran servicio a Andalucía que persigue conseguir es lograr que Olona sea expulsada legalmente del censo de Salobreña. Gran hazaña, ¿no tienen otra cosa mejor que hacer? ¡Pero si no va a ganar y puede que se vaya ella solita a Madrid! Aquí no tiene protagonismo. Lo va a tener porque al final va a sentar en el banquillo a los mismos que la han denunciado y les va a ganar. Cuando su partido le diga que se presente por Aragón se empadronará en Calamocha. ¡No nos quiten la animación principal de la campaña electoral Andalucía 2022! Ella pidiendo orden, los otros con que llega el llanto y rechinar de dientes con los fachas y los otros apretando pero si ahogar. Será divertido por una parte y aburrido, por previsible, por otra.