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Los medios y los días

Vacunas contra los miserables

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19 jun 2020 / 04:19 h - Actualizado: 18 jun 2020 / 11:26 h.
"Los medios y los días"
  • Vacunas contra los miserables

Necesitamos dos vacunas urgentemente: una contra el virus de la Covid-19 y otra contra los miserables desalmados que estimulan la pandemia. Y a estos últimos, si se infectaran y tuviéramos vacuna, habría que pensar si se les administraría o no porque son nocivos para su especie: están dejando, a conciencia, que la gente muera.

Sabemos sus nombres, los de los más poderosos, y los otros se pueden averiguar sin problema, pero el mundo les ha dado derecho de pernada, nadie actúa contra ellos, ningún tribunal internacional, ni la ONU, los cascos azules no fueron a sus casas a detenerlos y encarcelarlos por presuntos genocidas, nada, ahí siguen. Y no me refiero a Pedro Sánchez, no, ése no es más que un joven ambicioso que llega a plagiar su tesis doctoral para sus fines y eso lo dice todo de una persona porque a ésas sí que las conozco de cerca por mi profesión. Sánchez en todo caso merece un diploma por su facilidad para engatusar a la gente mediante gestos no verbales, palabras lacrimógenas y actos de falsa solidaridad.

Hay nombres, esos machotes que dijeron y siguen diciendo que la pandemia no es asunto de ellos aunque estén al frente de un país; esos que están aplicando leyes de punto y final sibilinas, dejándolo todo en manos de la selección natural más primitiva cuando una de las características de lo que llamamos civilización es la superación mediante la razón y la ciencia de esa selección natural aunque aparezcan otras formas naturales y sociales de matar al débil, por ejemplo, mediante presiones asfixiantes externas sobre su psicología.

Hay aliados de la pandemia menos relevantes e invisibles: son quienes, en primer término, permiten -incluso en Alemania presuntuosa- que cientos de personas vivan hacinadas en viviendas insalubres, y abusan de sus prójimos sólo porque necesitan comer y emigran para trabajar. Derechos elementales como el trabajo y la comida, vulnerados por miserables virus en forma humana, qué detestable y carroñera es mi especie, en cuanto le es posible se aprovecha del necesitado, no sé si puede haber vacuna contra tales comportamientos porque las tenemos que inventar los mismos que llevamos dentro una enfermedad que nace con nosotros y que acaso sea incurable.

El caso es que estos últimos virus rastreros con forma humana nos llevan a los virus más poderosos anteriores. ¿Quién permite que existan tantos virus humanos que actúan contra los humanos de esta forma y de otras semejantes? Lo permiten los virus genocidas y los que los votamos, en realidad, necesitamos una vacuna universal contra nuestra fase actual como seres vivos inconscientes que actuamos peor que todos aquellos seres vivos que se guían exclusivamente por sus instintos o por leyes naturales.

Estoy pensando que puede que seamos aún peores que el Sars Cov2, que yo sepa los Sars Cov2 no se matan entre ellos y aunque así fuera no sería de extrañar, lo extraño es que lo hagamos nosotros después de todos los pensadores que hemos parido a lo largo de la Historia. Y todos los sabios, y todos los líderes religiosos, y todo el arte, y todo el bien que hemos puesto en práctica.