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Playa fluvial de San Nicolás del Puerto, una de las opciones sin salir de la provincia. / J.Á.F.
Aunque la lógica y, sobre todo, el termómetro invitan a huir de la provincia en esta época en busca de parajes costeros, no siempre puede uno escaparse a la playa en verano ni todo el mundo tiene la suerte de contar con piscina en su bloque.
Pero no hay que hacer un drama de ello, porque Sevilla cuenta con otras opciones igualmente válidas para darse un remojón en estos meses en los que los días se hacen insoportables. Sin salir de la capital, el Ayuntamiento hispalense ya ha puesto en marcha la campaña de baño recreativo, con las piscinas de Rochelambert, Alcosa y Torreblanca destinadas a este fin. Por un precio de 5 euros para adultos –3 euros para discapacitados y mayores y entrada gratuita para menores de cinco años–, estos recintos estarán abiertos de 12.00 a 20.00 horas. También en la ciudad y para pasar la jornada completa se puede barajar la posibilidad de ir a Isla Mágica, el parque de atracciones que, desde hace tres años, incluye entre sus atractivos Agua Mágica, una zona acuática con instalaciones para todos los públicos. Aquópolis –Guadalpark, para los románticos– es ya todo un clásico en las instalaciones destinadas al baño en Sevilla. Eso sí, mucho más barato puede salir darse un paseo hasta la Alameda de Hércules, donde las fuentes en superficie –aunque ahora mismo están pendientes de revisión municipal y se encuentran fuera de servicio– pueden salvarle de la insolación.
Ya cogiendo el coche y a poco más de una hora y media de camino se encuentra la archiconocida playa fluvial de San Nicolás del Puerto, en la comarca de la Sierra Norte. Hasta aquí se desplazan cientos de visitantes que buscan una alternativa para bañarse al tiempo que se disfruta de las comodidades del casco urbano. Y prueba de su éxito es que el Ayuntamiento tuvo que regular el aparcamiento en la zona el año pasado e implantar una zona de pago de la que estuvieron exentos los vecinos de la localidad.
Los Lagos del Serrano, en Guillena, el pantano de El Pintado, en Cazalla de la Sierra, o la Isla Margarita, también en el municipio cazallero, son otras opciones igualmente atractivas para refrescarse en plena naturaleza sevillana.