-
Varios curiosos se agolparon tras el cordón que la Policía Nacional colocó en esta calle de Cerro Blanco. / José Manuel Vidal (Efe) -
La mampara colocada por la Policía científica. / José Manuel Vidal (Efe) -
La UME también se desplazó al lugar de los hechos. / El Correo
La Policía Nacional, asistida con maquinaria de la Unidad Militar de Emergencias, lleva desde el sábado trabajando a destajo en un pozo ciego de una vivienda de la barriada de Cerro Blanco de Dos Hermanas ante las sospechas de que encuentren restos humanos. Un trabajo que se inició sobre la pista –y el temor– de que en el fondo del pozo se encuentren los cuerpos de la madre y la hija de Bellavista que desaparecieron a mediados de septiembre, según informaron fuentes cercanas a la investigación policial. Tan fundadas son las sospechas que la Policía anunció ayer varias detenciones por la desaparición, aunque todavía está por determinar su implicación en los hechos. Poco más se pudo concretar por una desaparición cuya investigación se encuentra en secreto de sumario.
Todo ha partido, según ha podido conocer este medio, de la investigación que está llevando a cabo la Policía Nacional por orden de un Juzgado de Sevilla a raíz, al parecer, de la reciente detención de una persona, que ha podido facilitar la dirección –el 168 de la calle Cerro Blanco de la barriada que lleva el mismo nombre– donde se podrían encontrar varios cuerpos.
La Policía, desplazada al lugar, se encontró al parecer con la dificultad de poder excavar en el pozo, ya que estaba tapado por una pesada losa de hormigón, de ahí que recurrieran a la ayuda de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que ha trasladado desde su sede en Morón de la Frontera una máquina excavadora.
Los alrededores de la vivienda estaban acordonados por agentes tanto de la Policía Nacional como de la Policía Local de Dos Hermanas para evitar el acceso de personas ajenas a la investigación. De hecho, poco después de las siete de la tarde de ayer se instaló una mampara de separación de la vivienda con el resto de la calle, para proteger el trabajo, según la agencia Efe. Además, fuentes policiales aclararon que trabajarán durante toda la noche en el pozo.
De momento, y debido a que el Juzgado que ordenó el dispositivo había decretado el secreto de sumario, no había trascendido mucha información, salvo que el citado operativo se había desarrollado en el marco de la investigación iniciada para localizar a Sandra Capitán, de 26 años, y de su hija, Lucía Begines, de seis años, vecinas del barrio de Bellavista.
Madre e hija faltaban de su casa desde las 14.00 horas del pasado 16 de septiembre, sin que el coche de la mujer se hubiera movido de donde lo dejó estacionado, y con su teléfono móvil igualmente apagado desde ese día. Asimismo, la Policía centró la investigación en la expareja de Sandra, un ciudadano de origen turco, de 55 años de edad, y con antecedentes por tráfico de drogas, que también se encontraba en paradero desconocido. La Policía Nacional, en la búsqueda de información relacionada con este caso, ha acudido hasta la casa situada en Cerro Blanco, donde rastrea desde el sábado ante la posibilidad de que allí se encuentren personas enterradas bajo una pesada losa de hormigón.
Una barriada deprimida
El operativo policial desplegado se sitúa además en una barriada, la de Cerro Blanco, que es de las zonas más deprimidas de Dos Hermanas. La barriada está ocupada en su gran mayoría por viviendas de una planta, en la que es frecuente que se desarrollen operaciones contra el tráfico de drogas. Se encuentra situada además muy próxima a la barriada de Ibarburu, que recientemente ha vivido dos episodios de tiroteos, en uno de los cuales resultaron heridos tres menores de edad por disparos realizados con una pistola, y otro cuando un hombre resultó herido grave al recibir siete disparos en un posible ajuste de cuentas por cuestiones de drogas.