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Bomberos desinfectando las calles de Constantina usando el atomizador de propiedad municipal./ El Correo
Si hay una localidad que está sufriendo la virulencia del COVID-19 en esta segunda ola esa es, sin lugar a dudas, Constantina. Tras los contagios que sufrió la población en este verano, y que por fortuna consiguieron controlar, este mes de noviembre está resultando particularmente duro para esta localidad serrana que acumula en estos últimos 14 días un total de 87 positivos. Una cifra que ha convertido a Constantina en el pueblo con el índice más elevado de toda la provincia. Con una tasa de 1.475,6 por cada 100.000 habitantes.
Solicitud denegada
Alertados por la gravedad de la situación, el Ayuntamiento que encabeza Ruben Rivera se ha puesto en contacto con la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía para solicitar la realización de test masivos entre los vecinos. La pretensión del consistorio constantinense es tomar el pulso a la situación real, ya que, explican, “puede haber positivos asintomáticos que estén transmitiendo el virus sin ser conscientes”. Según reza en un comunicado hecho oficial por Rivera este mismo jueves la respuesta de la Junta ha sido negativa, “aunque seguiremos insistiendo”.
Responsabilidad individual
Ante esta situación, el Ayuntamiento de Constantina apela a la responsabilidad individual para frenar la expansión del virus en la localidad. Así, a los que ya están confinados por prescripción médica se le pide que respeten el aislamiento, incluido en de sus familiares. Con respecto a los que tengan sospecha de haber estado en contacto con algún positivo o persona susceptible de serlo, se le pide que guarden una cuarentena preventiva hasta tener la certeza de no estar contagiados. Por último, al resto de la población se le ruega la máxima cautela y el respeto a las normas mínimas de seguridad, tales como el uso de mascarillas, distanciamiento social, higiene de manos y reducción al máximo de las relaciones personales.