Exposiciones

El Pedroso rinde tributo a la escritura a través de las escuelas coránicas y Celestine Freinet

La exposición ofrece una nueva parte de la historia de la escritura. El visitante puede conocer cómo funcionaban las escuelas coránicas y los medios empleados

02 ago 2020 / 16:22 h - Actualizado: 02 ago 2020 / 16:30 h.
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  • Una muestra de la exposición. / El Correo
    Una muestra de la exposición. / El Correo

Hace tiempo ya que a la localidad de El Pedroso se le relaciona con el mundo de las letras. De hecho, el fundador de la todopoderosa editorial Planeta, José Manuel Lara Hernández, vino al mundo en este pueblo de la Sierra Morena sevillana. Junto a este hecho tan significativo, El Pedroso posee un maravilloso paseo por la historia de la escritura en un museo ubicado en unas antiguas escuelas. Un edificio diseñado por Anibal González y que, curiosamente, en el pueblo recibe el nombre de Escuelas Nuevas.

Con estos antecedentes, las piezas de la nueva exposición del Centro de la Cultura de El Pedroso encajan a la perfección, pues en ella se dan cita la escritura en el ámbito educativo (en este caso como enseñanza del corán) y también como método pedagógico a través de los distintos métodos de impresión. De fondo, el pasado árabe de la localidad, una bonita leyenda y la figura de Celestine Freinet. El resultado final, el complemento perfecto al Museo de la Historia de la Escritura de las Escuelas Nuevas de El Pedroso.

El Pedroso rinde tributo a la escritura a través de las escuelas coránicas y Celestine Freinet
Foto: El Correo

La Kura de Firrish

Antes de la conquista romana, El Pedroso se encontraba en la región conocida como Turdetania, que abarcaba el valle del Guadalquivir desde el Algarve hasta Sierra Morena. Bajo el influjo de Roma perteneció a la Bética y con la conquista musulmana entró a formar parte de la Kura de Firrish. En este último caso la organización territorial era más pequeña, tenía su capital en San Nicolás del Puerto y estaba formada por lo que hoy es la Sierra Morena sevillana además de las localidades pacenses de Azuaga y Malcocinado.

El Pedroso rinde tributo a la escritura a través de las escuelas coránicas y Celestine Freinet
Foto: El Correo

Este pasado musulman de El Pedroso sirve de apoyo para la primera parte de la exposición del Centro de la Cultura de las Escuelas Nuevas. Una exposición que, en este caso va a girar en torno al proceso de aprendizaje del corán mediante la escritura. Para ello se instruye al visitante acerca de las escuelas coránicas. Unas escuelas aún hoy existentes en Marruecos y que suponía el estudio del corán a través de su escritura en lohas. Son estas una tablas que se untaban con arcilla y sobre las que se escribía para a continuación recitarlas y memorizarlas antes de lavarlas para escribir un nuevo pasaje. Estas escuelas acogían a hombres de entre 3 y 18 años que ascendían de curso en función de su capacidad de aprendizaje y no de su edad. Aunque en esas tablas tan solo se escribía el corán, una vez al año, como premio se le permitía a los alumnos la realización de algún dibujo. Una vez concluido se procedía a su venta en las calles. Lohas como esta última pueden apreciarse en esta exposición, junto a los objetos cotidianos de esta escuela como el kalam (objeto que haría las veces de lápiz), el smag (tinta para escribir), o el Karray (que servía para marcar el ritmo y mantener la atención). Todo ello, además, ilustrado con fotografías de escuelas coránicas para que el visitante se forme una idea acerca de cómo era el aprendizaje del corán.

El Pedroso rinde tributo a la escritura a través de las escuelas coránicas y Celestine Freinet
Foto: El Correo

La leyenda de la piedra de la mora

No puede hablar se tradición árabe en El Pedroso si no se habla de La Piedra de la Mora. Es esta una leyenda que bien conocen los pedroseños y que muestran también con orgullo en esta exposición. Es esta la historia de Tomás, un comerciante cristiano que se enamoró de Zarha, una de las beduinas del harén del rey almohade An-Nasir, mientras este se hospedaba en la Kura de Firrish. Siendo correspondido, los amantes decidieron huir hacia las montañas y refugiarse del influjo del rey. La mala suerte hizo que Tomás fuera finalmente encontrado y apresado. Rota por el dolor, Zahra entregó su vida en un conjuro de magia ancestral para reunirse con su amado. Por eso, según la leyenda, todos los 8 de septiembre un lucero de la mañana, junto a un halo de luz de Luna, besan la Piedra de la Mora, una enorme piedra que se encuentra en el paraje conocido como La madroñera. Cuando ambos coinciden iluminan la entrada de la cueva en la que se refugiaron y las almas de los amantes se encuentran durante unos instantes, devolviendo al pueblo la esperanza de su amor eterno.

El Pedroso rinde tributo a la escritura a través de las escuelas coránicas y Celestine Freinet
Foto: El Correo

Celestine Freinet y la revolución pedagógica

Dando un enorme salto en el tiempo, de la escritura como método de aprendizaje del corán, pasamos a Freinet y su método práctico de enseñanza en el siglo XX.

Celestine Freinet (1896-1966) fue un maestro y pedagogo francés que revolucionó la enseñanza gracias a un método basado en al experiencia práctica y no solo en el estudio. Para Freinet era importante que sus alumnos fueran capaces de poner en práctica lo aprendido y para ello no dudó en desarrollar con ellos diferentes medios de impresión. Sus conocimientos y enseñanzas están contemplados en esta exposición a través de unos libros publicados por él mismo. Pero esta exposición no se limita únicamente a contar quien fue Freinet y lo que hizo, sino que, al igual que él hacía con sus alumnos, nos da a conocer de primera mano los métodos que utilizó. Así, en la exposición pueden contemplarse un limógrafo, una imprenta o el método de impresión mediante gelatina.

El Pedroso rinde tributo a la escritura a través de las escuelas coránicas y Celestine Freinet
Foto: El Correo

A través del primero, el limógrafo, el visitante conocerá cómo era posible la impresión de folios utilizando un cliché metálico, y cómo eran necesarias tres personas para llevar a cabo el proceso completo. También llama la atención el método de la gelatina y cómo esta absorvía la tinta sobre la cual, después podían hacerse hasta 50 copias posando el folio y pasándole una esponja. Por último, y no menos interesantes resulta la imprenta y su mecanismo espejo. Un mecanismo utilizado para colocar de manera correcta los tipos que se impregnaban en tinta para posteriormente prensar el papel y permitir sacar la copia.

La exposición, como ya hemos señalado supone un complemento al Museo de la Escritura de la misma localidad, además de una experiencia enriquecedora. El trabajo de recopilación de fotografías y aportación de material ha corrido a cargo de Carlos Jurado Carmona y de José Luis Jiménez. La muestra permanecerá abierta al visitante hasta el 31 de octubre.