Fuego cruzado por
la zona azul en Bami

El primer cara a cara termina sin acuerdo mientras que el Consistorio se compromete a hacer un estudio de movilidad

Manuel J. Fernández M_J_Fernandez /
02 oct 2015 / 07:58 h - Actualizado: 02 oct 2015 / 08:00 h.
"Zona azul","Bami"
  • El Consistorio estudia ampliar la plazas de minusválidos en zona azul a no empadronados en Sevilla. / P. Herrera
    El Consistorio estudia ampliar la plazas de minusválidos en zona azul a no empadronados en Sevilla. / P. Herrera

Opositores y partidarios de la zona azul en Bami se sentaron ayer por primera vez juntos con representantes del Ayuntamiento en una sesión de la Mesa de la Movilidad con la que el gobierno socialista de Juan Espadas tratar de buscar, entre otros objetivos, una solución consensuada a la polémica de la ampliación del sistema de aparcamiento regulado por pago o zona azul implantada por el gobierno el Zoido. La primera toma de contacto se cerró sin llegar a un acuerdo aunque, según matizaron fuentes municipales, sí sirvió para «conocer las diferentes posturas y también su disposición al diálogo», por lo que se prevé una nueva convocatoria «dentro de quince días».

El cara a cara entre la asociación de vecinos Bami Unido del Sur –defensores de la medida– y la Coordinadora contra la Zona Azul –la parte detractora– ha puesto sobre la mesa los argumentos de cada sector en esta lucha por lo azul a la hora de estacionar vehículos en el barrio. De un lado, la entidad vecinal mostró su rotundo rechazo a la reducción de plazas –un total de 200– que planea hacer Espadas en Bami, defendiendo que la regulación de los aparcamientos funciona. «La zona azul es la solución, no es el problema; pues frente a cualquier debate de ideologías, intereses económicos o políticos, está favoreciendo la normalidad en el barrio y ha echado a las mafias de aparcacoches ilegales o gorrillas», expuso convencida la portavoz vecinal, Ana Ojeda, quien además insistió en la necesidad de mantener un encuentro directo con el alcalde y en el acuerdo de la última asamblea vecinal de «manifestarse por el barrio en próximas fechas» al contar con la legitimación de «miles de firmas». Precisamente, en este punto relacionado con la cuota de representatividad del barrio surgió un encendido enfrentamiento entre Bami Unido y la Coordinadora, donde están la plataforma de pymes de Bami y la plataforma ciudadana, también de Bami, que pide la retirada de este sistema de aparcamiento.

En este sentido, la Coordinadora aprovechó su turno de palabra para recordar a Espadas «que cumpla con su programa electoral de derogar la ampliación de la zona azul», al tiempo que preguntó por los llamados bonos de comerciantes prometidos por el gobierno del PP «y que no llegan mientras siguen cayendo las ventas, hasta un 40 por ciento». Igualmente requirieron información sobre el parking construido y sin actividad de la plaza de Rafael Salgado. Según la Coordinadora, «no hubo respuestas convincentes».

En todo caso, los que piden una revisión de la zona azul dejaron claro su disposición a dialogar para evitar un enfrentamiento de vecinos, comerciantes y trabajadores, y dejó entrever algunas claves para la negociación. «Queremos que se quite, pero si no se puede, al menos que se reduzcan considerablemente los precios hasta un 40 por ciento o incluso gratis para residentes, como ocurre con las zonas verdes de Madrid o Cataluña». Nuevamente insistieron en la ilegalidad de la ampliación del PP y subrayaron que «existe una Ley de Haciendas Locales que indica que no se supere el coste del servicio [de zona azul] y aquí se triplica».

Pero entre argumentos encontrados, las distintas partes afectadas respaldaron la medida de Espadas de abrir de plazas de movilidad reducida en zona azul a discapacitados no empadronados en Sevilla; así como el estudio de movilidad anunciado para toda la ciudad –y por tanto, también para Bami– para poner la lupa en los problemas de cada zona y buscar soluciones. Es por ello que para el Ayuntamiento este primer encuentro ha servido «para conocer que hay posturas diferentes pero también disposición a dialogar». Un diálogo en el que las tarifas y una nueva negociación con Aussa se perfilan como piezas claves.