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Andrés Roca Rey. / El Correo
Andrés Roca Rey ya tiene apuntada la primera fecha de su agenda. Es la del día 3 de noviembre, día escogido para volver a sentir el tacto del traje de luces en la feria del Señor de los Milagros de Lima. Atrás habrán quedado casi cuatro meses en el dique seco, recuperándose de la grave lesión cervical que se produjo en San Isidro y le obligó a cortar por lo sano después de actuar en la feria de San Fermín.
Hay que recordar que el diestro peruano llegó a ser atendido por distintos especialistas en España y en Nueva York. Después de tomar la decisión de cortar definitivamente la temporada ha tenido que seguir un estricto y riguroso plan médico y de fisioterapia en Sevilla para restablecerse por completo. El origen de su lesión está en la fuerte voltereta sufrida en Madrid el pasado 22 de mayo cuando toreaba de capote a un sobrero del Conde de Mayalde. El golpe le provocó la hernia cervical que le impidió completar la temporada.
Evolución del percance
Roca había decidido en un primer momento dejar en blanco el mes de agosto. No pudo acudir a su segundo compromiso en San Fermín y desde entonces ya no pudo volver a vestirse de luces. En Pamplona se pudo constatar que no tenía fuerza en el brazo. El parte oficial emitido entonces hablaba de “braquialgia derecha dependiente de C7 y una tendinopatía de hombro supraespinoso con derrame”. Antes ya había tenido que renunciar a torear en las plazas de Teruel, Burgos y Soria llegándose a propagar el rumor –seguramente interesado- de que esas ausencias sólo eran una estrategia para elevar su caché.
Después del ciclo pamplonica siguió cayéndose de distintas plazas mientras se imponía la verdad de su estado de forma. Finalmente se vio obligado a emitir un primer comunicado que certificaba la gravedad de la lesión. El diestro peruano viajó a Nueva York para ser tratado en el Hospital for Special Surgery. Posteriormente si fijó la fecha del 31 de agosto, en la Goyesca de Ronda, para recuperar el ritmo de la temporada. Pero no pudo ser, tomándose la decisión definitiva de aguardar a la campaña americana para dar tiempo a la necesaria rehabilitación.
Roca tiene contratada otra tarde más en Lima, su tierra natal, para recuperar el tono antes de afrontar una intensa campaña americana. El diestro peruano ha manifestado a través de un comunicado “su inmenso agradecimiento por las muestras de cariño y apoyo que ha recibido desde todos los estamentos de la Fiesta y también desde fuera del mundo taurino”. Roca Rey, concluye dicho comunicado “confía en poder devolver todo este apoyo dentro del ruedo a partir del próximo mes de noviembre”.