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Pezzella despeja un balón ante Jonatahas. / Javier Etxezarreta
Pese a la penosa primera parte que brindó, no mereció irse de vacío el Betis de Anoeta. Al descanso perdía 2-0 después de 45 minutos lastimosos, en los que salió solo a defender y lo hizo de mala manera, pues en dos centros laterales, uno en jugada y otro a balón parado, Xabi Prieto e Íñigo Martínez ganaron por alto a sus marcadores y batieron a Adán de forma inapelable. El equipo mejoró bastante con los cambios tras el descanso –hacerlo peor era realmente complicado–, recortó pronto distancias y gozó de varias ocasiones para empatar, pero algunas se perdieron por impericia y otras por la caserísima labor del navarro Prieto Iglesias, que se tragó un claro penalti sobre Dani Ceballos y dejó sin sanción un par de faltas muy peligrosas en las cercanías del área de la Real Sociedad.
El plan de Merino era mantener la intensidad defensiva mostrada ante Villarreal y Real Madrid en la primera parte, para intentar sorprender en la segunda con la gente de calidad que se había quedado en el banquillo. Pero su todo su plan se empezó a derrumbar tras el primer gol, en el 17’, cuando Molinero no encimó lo suficiente a Héctor en la banda y le permitió mandar un templado centro que el veterano Xabi Prieto cabeceó de forma inapelable ante el bisoño Varela.
El remate llegó un cuarto de hora después en una acción a balón parado, en la que Íñigo Martínez volvió a marcar de cabeza al eludir la marca de Pezzella y rematar un templado centro de Xabi Prieto desde el otro costado.
Al Betis no se le vio en ataque en esta primera mitad, en la que apenas pisó el área rival, así que Merino estaba obligado a cambiar los planes en el descanso. Y lo hizo. Joaquín y Van Wolfswinkel entraron por Molinero y Fabián. El equipo fue otro, a los cinco minutos Rubén Castro rompía sus largos dos meses de sequía tras una gran asistencia desde la banda derecha del holandés, que luego, en un par de acciones algo embarulladas tuvo un par de ocasiones para empatar.
Los verdiblancos, en la segunda parte, fueron mejores que los donostiarras, que apenas volvieron a acercarse a las inmediaciones de Adán hasta los minutos finales, cuando el partido era ya una ruleta rusa. Dani Ceballos entró en el 70 y en el primer balón que tocó le hicieron un claro penalti que el ‘paisano’ navarro Prieto Iglesias no quiso pitar. Antes había dejado sin sanción una clara falta en la frontal del área sobre Petros y luego otra aún más clara sobre Joaquín. Si uno de Almería no puede pitar a uno de Sevilla es inconcebible que uno de Pamplona arbitre en San Sebastián. El caserísimo árbitro, de remate, solo descontó dos minutos –en la banda había otro ‘paisano’– lo que provocó las airadas protestas de los béticos, en especial de Joaquín, que vio una amarilla por ello mientras el partido estaba en su recta final.
Real Sociedad: Rulli; Aritz (Zaldua, min. 46), Mikel, Iñigo, Héctor; Illarramendi, Pardo (Bruma, min. 73), Prieto; Oyarzabal (Bergara, min. 56), Vela y Jonathas.
Real Betis: Adán; Varela (Ceballos, min. 71), Bruno, Pezzela, Molinero (Van Wolfswinkel, min. 46); Petros, N?Diaye, Portillo, Fabián (Joaquín, min. 46), Cejudo y Castro.
Árbitro: Prieto Iglesias (Navarra). Amonestaciones a Pardo, Cejudo, Molinero y Joaquín. La de Cejudo es la quinta y será baja el domingo próximo ante el Valencia.
Goles: 1-0, m.17: Xabi Prieto cabecea un centro desde la izquierda de Héctor. 2-0, m. 33: Íñigo Martínez cabecea una falta lateral sacada desde la derecha por Xabi Prieto. 2-1, m50: Rubén Castro marca a placer tras una asistencia de Van Wolfswinkel.
Escenario: unos 15.877 aficionados en el estadio de Anoeta.