Héctor Cúper ya sabe a lo que jugará este Betis. El técnico argentino tildó de clave el mes de octubre y se ha encontrado con la dura realidad de los números. El Betis ha logrado tres tristes puntos de doce en juego y no se ha enfrentado precisamente a la reencarnación del Brasil de 1970.
"Le he dicho a los jugadores que nos enfrentamos a un mes muy importante. Los partidos que tenemos en este mes de octubre van a marcar la temporada y veo a los jugadores muy bien". Son palabras de Héctor Cúper, entrenador del Real Betis Balompié, en la semana posterior al empate cosechado por su equipo ante el Murcia. Venía el conjunto verdiblanco de derrotar al Mallorca con anterioridad por 3-0 y cierto halo de optimismo se cernía sobre el futuro próximo del Betis.
La terrible derrota del pasado miércoles frente a Osasuna ha servido para dilapidar esos ánimos de Cúper por tener como objetivo algo más que no sea pelear por el descenso. En los cuatro partidos jugados por el Betis en el mes de octubre, tan sólo ha sido capaz de lograr tres puntos de un total de doce, y todo ante cuatro rivales que se encuentran situados entre la novena y la décimocuarta plaza de la clasificación.
Después de derrotar al Mallorca, el Betis encaraba la cita ante el Murcia con visos de poder dar un salto en la tabla clasificatoria. El resultado fue un empate a cero que dejó para el siguiente encuentro ante el Racing la opción de seguir vivos en la Liga. Los primeros síntomas de descomposición llegaron ese día frente a los cántabros. El Racing pasó por encima del Betis de principio a fin del encuentro, aunque afortunadamente al menos hizo un gol que le llevó al empate final a un gol.
El equipo siguió con su caída libre en Bilbao, donde no fue capaz de tirar ni una vez con peligro a la meta del Athletic. Los vascos gozaron de las mejores ocasiones del gol y sólo Ricardo permitió que el Betis regresara a Sevilla con un punto en el zurrón.
Lo del pasado miércoles todavía está muy vivo en la retina de los aficionados verdiblancos. Lamentable actuación y derrota por 0-3 en un encuentro donde no hubo nada. Fin a la racha de cuatro partidos sin conocer la derrota y un bagaje en el mes de octubre de tres sobre doce puntos posibles. Números desastrosos que han provocado que Cúper entienda ya a qué tiene que jugar su equipo, que no es otra cosa que evitar el descenso a Segunda división por tercera vez y de forma consecutiva.
Cúper ha intentado levantar el ánimo de su plantilla en las dos últimas sesiones de entrenamiento, pero también les ha hablado muy claro para indicarle que hay que conseguir puntos como sea. Para ello el Betis debe mejorar sus números, sobre todo en ataque. El conjunto heliopolitano sólo lleva ocho goles a favor después de 10 jornadas y su aparente fortaleza defensiva ha pasado a mejor vida después de la goleada de Osasuna.
