Una décima por debajo de lo esperado. Así cerró el año el Índice de Precios de Consumo (IPC), que subió un 4,2% en diciembre, tasa que no se alcanzaba desde enero de 2006. El encarecimiento de los alimentos y del petróleo fueron, al igual que en los últimos meses, los mayores responsables.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) puso ayer punto y final a la incertidumbre de cuánto habían subido los precios en diciembre. Lo hicieron un 4,2% tanto en España como en Andalucía y en Sevilla, una décima menos de lo que pronosticaba el indicador adelantado para el conjunto nacional, pero una más de la registrada en noviembre.
De los doce grupos que componen la cesta de la compra, sólo dos escaparon del incremento de precios. Las medicinas (con un descenso del 2,1%) y el ocio y la cultura (-0,8%) se encargaron de aportar un ligero respiro a las economías domésticas, mientras que el transporte y los alimentos concentraron las mayores subidas en el conjunto del año, de un 7,3% y un 6,6%, respectivamente.
Por su parte, la inflación subyacente, que excluye los alimentos frescos y la energía, cerró el ejercicio en el 3,3%, mientras que el diferencial de la inflación española con la del resto de países de la Zona Euro se situó en 1,2 puntos en 2007, el más alto desde septiembre de 2006, pero similar a la media que ha mantenido España desde su entrada en la Unión Monetaria, de 1,1 puntos.
La leche se convirtió en 2007 en el producto con el aumento más disparatado, hasta un 31% más. Aunque no el único. En los últimos doce meses se han encarecido la carne de vacuno (14,4%), la de ave (un 10,2%), los productos lácteos (19%), la carne de ovino (9,9%), los preparados de legumbres y hortalizas (9,8%), los huevos (9,6%) y las frutas frescas (7,8%), entre otros productos, que no han dado margen al bolsillo. En el extremo contrario, los aceites redujeron su coste un 9%, los medicamentos un 6,6% y los objetos recreativos un 6,5%.
Por su parte, los carburantes y combustibles acumularon subidas del 14,4%, los productos energéticos el 11,5% y los bienes industriales el 3,1%.
El Gobierno insistió en el carácter exógeno del alza de los precios y en que la tasa de inflación se moderará a partir de la próxima primavera hasta situarse por debajo del 3% a final de año.
Economía achaca a la "notable" subida de los precios internacionales del petróleo y los cereales", la situación que, recuerda, también se ha producido en el resto de los países de la Eurozona.
Por comunidades, Murcia se erigió en la más inflacionista con un IPC del 4,7%, frente a La Rioja y Asturias, que registraron las menores subidas, un 3,9%.
En el caso de Andalucía, donde se quedó en el 4,2%, destaca el comportamiento de Almería, la provincia en la que más crecieron los precios (4,5%), seguida de Cádiz y Huelva (4,3%), Sevilla (4,2%) Jaén (4,1%) y Córdoba y Málaga, que se apuntaron un 4%, según los datos del INE.
El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, restó importancia a esta subida, que consideró un incremento "transitorio" que "seguramente" descenderá en los próximos meses, al tiempo que recordó que no es la primera vez que se registra, ya que en 2001 "fue igual".
El Servicio de Estudios del Consejo de las Cámaras de Comercio señaló que, a pesar del mal dato del mes de diciembre, la inflación media del año 2007 (que se sitúa en el 2,8%) está muy por debajo de la registrada en los últimos años y que es la más moderada desde 1999. Además, destacó la necesidad de mantener el diferencial mínimo de inflación con la Zona Euro para no perjudicar la competitividad de las empresas en los mercados internacionales.
