Políticamente incorrectas fueron las declaraciones del candidato de Coalición Andalucista justo después de enterarse del brutal asesinato de ETA. Julián Álvarez soltó esta perla en una comida con los periodistas de su caravana: "Nos duele que el atentado se haya producido en medio de las elecciones andaluzas". Eso no fue todo. El dirigente nacionalista criticó al presidente de la Junta, Manuel Chaves, por "haber provocado que las autonómicas coincidan con las generales". "Hubiésemos querido -añadió- que los comicios andaluces no estuvieran marcados por este asesinato".
Aparte de ese comentario, el líder de CA mostró su "desolación y repulsa" por este "vil y absurdo" crimen. "A ETA esta muerte no le va a servir de nada. Al contrario, todos tenemos claro que el único fin de la banda es que los terroristas estén en la cárcel y cumplan sus condenas", dijo.
Álvarez, que asistirá hoy al entierro del edil, llamó a la participación el próximo domingo. "La mejor respuesta es que los ciudadanos voten en libertad", señaló. También pidió "prudencia y sensatez" a los partidos para que no "aprovechen el atentado para captar votos".
Los andalucistas suspendieron el mitin de fin de campaña previsto para anoche en un hotel de Sevilla pero celebraron un acto de repulsa al asesinato del ex concejal socialista en el mismo hotel. La coalición guardó dos minutos de silencio para condenar el ataque.
La decisión de cancelar los actos electorales no estuvo clara desde el principio. En un primer momento, Álvarez explicó que su formación apoyaría y seguiría las iniciativas de los grandes partidos. Sin embargo, tras el almuerzo con los medios en un restaurante de Triana, la cúpula andalucista -formada por el propio líder, Pilar González, Antonia Agudo y Manuel Laizpiur- y los dirigentes del PSA Manuel Cobacho y Juan Román se reunieron en una cafetería cercana para deliberar. La cita duró más de media hora. Aunque el candidato de CA aseguró que había habido unidad, lo cierto es que durante el encuentro hubo distintas posiciones. Los miembros del PSA eran partidarios en un principio de continuar con la campaña electoral.
