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Aprendiendo a competir entre fogones

El equipo verde venció al rojo en este enfrentamiento culinario entre los alumnos de la Escuela de Hostelería de Sevilla de la Taberna del Alabardero.

el 25 abr 2014 / 08:30 h.

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Eva Cepero es una activa comunicadora que se mueve principalmente en redes sociales y está desarrollando una interesante labor en el mundo de la gastronomía. Atendiendo a su invitación acudimos como jurado a una interesante competición entre muy jóvenes estudiantes de tercer curso de la Escuela de Hostelería de Sevilla, más conocida como la escuela de la Taberna del Alabardero, de donde han salido muchas de las jóvenes promesas de la nueva cocina sevillana, profesionales que han demostrado su preparación tanto en el extranjero como en muchos de los mejores restaurantes de España. Los participantes posan orgullosos de sus creaciones gastronómicas. / Foto: J.C. Los participantes posan orgullosos de sus creaciones gastronómicas. / Foto: J.C. Atendiendo principalmente a la asignatura de comunicación, una de las materias que se imparten en la Escuela, dos equipos de estos estudiantes han medido sus fuerzas para ofrecernos un interesante duelo de fogones. El reto no solo consistía en la elaboración de un menú completo –entrada, dos platos y postre–, aunque también era importante calibrar la capacidad de cada equipo para gestionar la organización del equipo de cocina, la limpieza y destreza en las técnicas de ejecución, la adecuación a los productos disponibles y la calibración de las propiedades nutritivas de cada plato, además de la labor de relación y fomento del trabajo a través de las redes sociales. Tanto el equipo rojo –comandado por el joven Miguel Galán y formado por Amaia García, Ignacio Font, Daniel Córdoba, Reynaldo Mora, Clara Dorado, Fernando Santana y Alejandro García– como el equipo verde –comandado por la joven María Ángeles Flox y formado por Rafael Cañas, Álvaro de la Fuente, Francisco Mendoza, Elías Cabrera, Ignacio Fernández y Joao Guerreiro– se afanaron para ofrecer al jurado un menú equilibrado, sabroso y lleno de creatividad. En mayor o menor medida lo consiguieron, con platos a gran nivel, como el Jugo de tomate infusionado en menta con verduras y frutas de temporada con torta y aceite de oliva virgen extra, con mango, zanahoria, nabo y el corazón de tomate, quizás demasiado marcado por el ajo, pero un plato fresco y de gran nivel. Igualmente el equipo verde sorprendió con una muy interesante tempura que ofrecía la novedad de estar marcada por curry rojo y una sabrosa mayonesa de soja, ambos toques que propiciaban una variante más original que las tempuras habituales. Ambos equipos emplearon en diversas recetas los productos de dos patrocinadores del evento, las nuevas tortas sin azúcar de Inés Rosales y el aceite de oliva virgen extra jiennense Castillo de Canena, distribuido por la empresa de productos gourmets Selectum Gastronomía. La victoria del equipo verde, por muy escaso margen, solo ha sido una anécdota en un bonita experiencia que demuestra la pujanza de la gastronomía en nuestro país y en nuetra ciudad en general, que esperemos se traduzca en una nueva hornada de buenos profesionales que consigan ofrecer al público locales que prestigien la hostelería de nuestra ciudad y la pongan al nivel que desde hace años se viene mereciendo.

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