La película The wrestler del director neoyorquino Darren Aronofsky e interpretada por Mickey Rourke recibió ayer el León de Oro a la mejor película de la 65ª edición de la Mostra de Venecia.
El jurado, presidido por el director alemán Wim Wenders y en el que se encontraba la cineasta argentina Lucrecia Martel, ha considerado esta película, que trata sobre un profesional de lucha libre al final de su carrera, como la mejor de las 21 que han competido por este galardón.
Aunque el jurado no entregó la Copa Volpi al mejor actor a Rourke, Wenders destacó al entregar el premio que su interpretación en la película "llegaba al corazón". Para la perfección de la película fue excelente que el atípico actor estadounidense se dedicara durante años al boxeo profesional tras su gran lanzamiento cinematográfico en la erótica Nueve semanas y media (1986) con Kim Basinger como coptrotagonista.
Y por si fuera poco, Rourke reconoció ayer tras el pase del filme que "desafortunadamente" él tenía "muchos paralelismos" con el personaje, porque "hace quince años tiró a la basura" su carrera.
The wrestler muestra a Randy Robinson, un luchador al final de su carrera profesional, cuando se sube a cuadriláteros de tercera categoría y su salud empieza a pasar la factura de los años de peleas, no por amañadas, menos brutales.
Randy empieza entonces su particular ajuste de cuentas con la vida, una hija abandonada, interpretada por Evan Rachel Woods, y una soledad en la pobreza que intenta superar con el amor hacia una streaper, Marisa Tomei.
En definitiva, la película es un clásico, pero funciona y muestra que tras su sonado fracaso con The fountain, Aronofsky encuentra otra vez el camino de la narración y es capaz de enganchar al espectador.
Tras conocerse que era el ganador Aronofsky agradeció el premio y lo dedicó a todos los luchadores de wrest-ling que en nombre de la diversión "se machacan el cuerpo y el alma".
Por su parte, el cineasta ruso Aleksei German Jr. recibió el León de Plata al mejor director por su película Bumaznyj soldat (Paper Soldier). El actor italiano Silvio Orlando obtuvo la Copa Volpi a la mejor interpretación masculina por su actuación en Il Papà di Giovanna, de Pupi Avati, en la que interpreta al personaje que da nombre a la película, mientras que la actriz francesa Dominique Blanc ha se llevó la Volpi a la mejor actriz por su trabajo en L'Autre de Patrick Mario Bernard y Pierre Trividic.
También se concedieron los premios colaterales del Festival: el FIPRESCI a la película franco-argelina Gabbla, de Tariq Teguia, y el Gran Premio de Orizzonti para la película filipina Melancholia, de Lav Díaz.
