Los que cada día se topan con atascos en las vías de gran capacidad del área metropolitana, sobre todo en los accesos y salidas de Sevilla, tal vez no lo hayan notado, porque el problema todavía resulta acuciante, pero lo cierto es que el tráfico ha descendido este año en todas ellas, en uno o en los dos sentidos.
De momento sólo funciona una línea del Metro de Sevilla, el Cercanías lleva años esperando su ampliación y la red de autobuses también aguarda plataformas reservadas para ser más competitiva. De modo que, como las alternativas de transporte público eficiente todavía son pocas en el área metropolitana, las autoridades atribuyen este descenso en los flujos de vehículos en la aglomeración urbana a la crisis. En concreto al aumento del desempleo, que hace que sean menos los que tienen que coger el coche para ir a trabajar a la capital hispalense desde su residencia en la corona, o viceversa, los que se desplazan desde Sevilla hacia alguno de los numerosos polígonos de la periferia, que son prácticamente los mismos.
De hecho, los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) demuestran que las intensidades medias en las vías de gran capacidad son muy similares tanto en las entradas a Sevilla como en las salidas. Es decir, que si por ejemplo a las 8.00 horas hay unos 3.000 vehículos circulando hacia la comarca del Aljarafe por la autopista Sevilla-Huelva (A-49), son unos 3.200 los que lo hacen en sentido contrario.
Lo más llamativo es, sin embargo, comparar las diferencias entre 2008 y 2009, que arrojan un descenso generalizado del tráfico en las vías de gran capacidad, donde además de la citada, se incluyen la ronda de circunvalación SE-30, la autovía Sevilla-Utrera (A-376), la autovía Sevilla-Málaga (A-92), la autovía de Coria del Río (A-8058), la autovía Madrid-Cádiz (A-4) y la carretera Sevilla-Cádiz (N-IV).
No son grandes variaciones pero sí es significativo, según indicaron desde la DGT, este cambio de tendencia dentro de la aglomeración urbana, ya que todos los puntos estudiados corresponden a los accesos y salidas de Sevilla siempre dentro del área metropolitana, que comprende 46 municipios, incluida la capital hispalense.
En concreto, el mayor descenso se ha registrado en la N-IV sentido Cádiz, con un 5,65% menos de vehículos de media los días laborables. No obstante, por franja horaria, la mayor reducción se detecta en la autovía Sevilla-Utrera, en dirección a la capital hispalense, con un 17,31% menos de tráfico entre las 15.00 y las 16.00 horas, según los mismos datos de la DGT. Pero, paradójicamente, esta ruta es la que registra también la mayor subida por franja horaria, en concreto un 18,06% más de vehículos entre las 24.00 y la 1.00 horas.
Por carreteras destaca que el tráfico ha descendido este año en los dos sentidos en la A-376, en la N-IV y en la A-8058, así como en alguno de ellos en la SE-30, en la A-92, en la A-4 y en la autopista del Quinto Centenario.
En estos momentos, la vía gran capacidad del área metropolitana que soporta mayor volumen de tráfico diario es la ronda de circunvalación, llamada a convertirse en un bulevar cuando esté completa la SE-40, ahora en ejecución. En concreto, la SE-30 soporta una intensidad media diaria de casi 150.000 vehículos. Le sigue por volumen de tráfico la A-8058, con más de 120.000, lo que la convierte en el auténtico embudo del Aljarafe en las horas punta.
