Local

Buenos, feos y malos

Con un muerto, heridos, detenidos, mucho ruido y poquísimas nueces (para ellos) ha terminado la huelga de camioneros en la que, como en todo conflicto, existen los mismos personajes que en la película de Sergio Leone: buenos, feos y malos.

el 15 sep 2009 / 06:21 h.

Con un muerto, heridos, detenidos, mucho ruido y poquísimas nueces (para ellos) ha terminado la huelga de camioneros en la que, como en todo conflicto, existen los mismos personajes que en la película de Sergio Leone: buenos, feos y malos.

Allí el bueno, Clint Eastwood, sólo era un guapo, ni mejor ni peor que Lee Van Cleef o Eli Wallach y aquí los malos -los camioneros- han hecho verdaderamente el papel de este último que se dejaba poner la soga al cuello. Puede que de feos hayan quedado miembros del gobierno como Magdalena Álvarez o Rubalcaba, incluso, Rodríguez Zapatero pero los verdaderos malos no han aparecido en pantalla.

Los palos sociales se los han llevado esos pobres hombres que se pasan media vida sin saber si van o vienen, sentimentalmente débiles y, en el fondo, unos pedazos de pan que en plena huelga se emocionaban como niños viendo un partido de fútbol.

Sin embargo, mientras ellos se ahorcaban, otros mandaban sacar de sus almacenes productos atrasados por la bajada del consumo en los últimos meses, les ponían precios más altos, los vendían a quienes llegaban (incluidas las mujeres de los camioneros) temiendo al desabastecimiento. Para quedar de buenos veían también el mismo partido pero pensando, a lo mejor, en qué jugadores ficharían con las ganancias obtenidas gracias a la huelga de estos buenazos que quedaban de malos y, en realidad, eran tontos.

Escritor e historiador

antonio_zoido@hotmail.com

  • 1