El guión se cumplió. Antonio Pulido, presidente de Cajasol, cosechó ayer la mayoría absoluta del consejo de administración, que se reunión en Guadalajara, para cerrar su entrada en Banca Cívica, el Sistema de Protección Institucional (SIP o fusión fría) que agrupa a Caja Navarra, Caja Canarias y Caja Burgos.
Fueron diecisiete votos a favor, dos en contra y tres abstenciones. El sí vino de los consejeros de procedencia socialista y popular, los de Comisiones Obreras dijeron ya veremos, pero no obstaculizamos la operación, y el no procedió de los ugetistas.
Según fuentes cercanas al órgano de gobierno, Pulido expuso las bondades de la integración en Banca Cívica, que será, dijo, muy rápida. De hecho, en los próximos días se rubricará el protocolo que recogerá las bases del desembarco de Cajasol, y que será firmado por los presidentes de las cuatro cajas implicadas en el SIP.
Fuentes de UGT señalaron que el no a la operación se explica primero por la oposición de este sindicato a los SIP -a su juicio, desvirtúan la naturaleza de las cajas al derivar en bancos-, y segundo por la ausencia de detalles sobre las condiciones laborales de la entrada, el ajuste de plantilla y, por último, el plan de viabilidad. Sugirieron que, una vez que las conozcan, variarán o no el sentido de su voto.
Pulido, según las fuentes, reiteró la necesidad de acometer con rapidez el proceso, de manera que la asamblea general de la entidad que dé su definitiva bendición se celebre antes de que acabe el año. Antes deberá convocarse otro consejo que apruebe el protocolo alcanzado.
Cajasol, según destacó su presidente, asumirá un importante papel de liderazgo en el SIP, pues éste tendrá su sede central (social y fiscal) en Sevilla. La entidad sevillana tendrá un 29,1% de la sociedad y ejercerá una minoría de bloqueo en decisiones de importancia para el conjunto del grupo financiero.
"Éste es un paso muy importante para Cajasol, en el que nuestra entidad inicia una andadura clave para su crecimiento, en lo que será sin duda la creación de uno de los principales grupos financieros españoles, que ocupará el quinto puesto en el ranking nacional", comentó Pulido, quien agradeció el apoyo "explícito" del Banco de España -ha tutelado la operación- y del presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán.
Justo en el día en que el consejo de Cajasol autorizaba llevar las gestiones para hacer efectiva su integración en el grupo Banca Cívica, este grupo actual de tres cajas anunció que el próximo 1 de enero "cumplirá un hito fundamental en su proyecto de integración".
En esa fecha, el banco que ejercerá de cabecera tendrá clientes directos de Banca Cívica. El proyecto, al que se sumará después Cajasol -una vez obtenidas las autorizaciones del Banco de España, el Gobierno andaluz y Defensa de la Competencia-, será entonces una realidad.
En los cinco meses desde que el banco comenzó a operar, el 18 de junio, se han ido dando pasos importantes en esta integración, como la unificación de la tesorería de las tres cajas en el banco o la consolidación contable de resultados del grupo en el tercer trimestre.
150 personas trabajan ya en la actual sede central de Madrid. La cifra irá creciendo.
Al respecto de la integración de Cajasol en Banca Cívica, el secretario general de Economía de la Junta, Gaspar Llanes, dijo ayer que el fortalecimiento de la caja y su solvencia es la primera regla que tienen que ver los responsables de una entidad. Si el consejo así lo considera, "no habrá ningún tipo de problema".
