Caparrós, durante un partido reciente de esta Liga. Foto: EFE.
Joaquín Caparrós tiene mucha experiencia como entrenador a sus espaldas y confía en que la situación qque vive en el Granada sea pasajera. Levantar el vuelo es lo que pretende el exsevillista, pues su equipo atraviesa una crisis monumental, con más de tres meses sin ganar en la Liga. El míster granadinista se mostró ayer preocupado por la desilusión que se han llevado con el entrenador los aficionados del club nazarí, pero prometió dar la sangre en cada partido para enmendar la situación, empezando por hoy mismo: Soy consciente de cómo está nuestra gente, de la desilusión que se han llevado.
Creo que nos viene bien el partido. Estamos deseosos de dar la sangre en cada encuentro. Llevo mucho tiempo viviendo este tipo de situaciones como entrenador, pero ahora estamos centrados en la Copa. No valen palabras, tenemos que transmitir con resultados.
Caparrós subrayó que ahora es el momento de estar todos unidos. Nuestra afición, que está haciendo un esfuerzo por animarnos, y nosotros tenemos que estar unidos y sumar todos. El vestuario es consciente de que todos nos necesitamos. El utrerano se siente con muchas ganas y mucha ilusión para afrontar los octavos de final de esta edición de la Copa del Rey, aunque muchos la vean como incómoda para el Granada: Es un torneo que da prestigio a los jugadores y al club. La Copa es muy bonita y por lo tanto somos conscientes de que necesitamos darle alegría a nuestra gente. Necesitamos adquirir autoestima y vamos a intentar hacer dos partidos buenos frente a un equipo que es copero en los últimos años. Queremos transmitir sensaciones de que el equipo está vivo. Ahora es la Copa y vamos a pensar exclusivamente en esta competición.
