Pese a su crítica situación, son muchos los ciudadanos que buscan en los ayuntamientos una tabla de salvación ante los altos índices de desempleo. En el caso del Consistorio de Los Palacios y Villafranca. Aunque el plazo para inscribirse en la bolsa de trabajo municipal que acaba de abrir no termina hasta el próximo 29 de febrero, en sólo tres días se han inscrito más de 900 palaciegos que aspiran a una de las plazas ofertadas: de enfermero, ordenanza, auxiliar administrativo, auxiliar de biblioteca, limpiador, oficial de construcción, peón general, jardinero, pintor, conductor, electricista, psicólogo y trabajador social. “Esperamos que al final pasen por aquí varios miles de aspirantes”, aseguran fuentes municipales, conocedoras de los más de 7.000 desempleados que engrosan la lista del paro en este municipio del Bajo Guadalquivir. “Es la primera vez que estas plazas serán ocupadas de acuerdo con los principios de mérito y capacidad, habiendo publicado la convocatoria con transparencia, imparcialidad e independencia de los órganos de selección”, asegura el alcalde, Juan Manuel Valle (IP-IU), orgulloso de haber aprobado la ordenanza por unanimidad el pasado mes de noviembre.
Precisamente a propuesta de IU, el último pleno de la Diputación de Sevilla aprobó un paquete de medidas anticrisis entre las que destacaba la ejecución de varios planes de empleo público, que supondrá una inversión de 10 millones de euros. En el caso de Los Palacios y Villafranca, este plan de empleo del ente provincial se conectará con la recién creada bolsa de empleo. “Ahora esperamos incluso un plan especial de empleo de la Unión Europea”, han señalado fuentes cercanas al alcalde. De llegar ambos planes, los temporeros no sólo aspirarán a obras menores de reforma para mejorar el pueblo, sino incluso “a hacer una buena piscina cubierta”.
El objeto de la bolsa de trabajo es cubrir todas las necesidades de puestos de trabajo que se creen en el Ayuntamiento a consecuencia de bajas por incapacidad temporal, licencias y permisos, vacaciones, jubilaciones, nuevos servicios, por acumulación de tareas y cualquier otro tipo de necesidad de carácter temporal. Su vigencia será de 2 años a contar desde la publicación de las listas definitivas. Transcurrido este tiempo, cesarán los derechos de las personas incluidas en ella, si bien se podrá reabrir anualmente para actualizar los datos. Los aspirantes admitidos serán llamados vía telefónica a medida que surjan las necesidades de su contratación por riguroso orden de inscripción. El período mínimo de contratación, de forma continuada o discontinua, será de dos meses. Se reserva el 7% de los puestos ofertados para ser cubiertos por personas con discapacidad. Los aspirantes deberán tener cumplidos dieciséis años de edad y estarán en posesión del título necesario para cada tipo de plaza.
