El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, rechazó ayer revisar los acuerdos con el Vaticano, a la vez que se mostró convencido de que el cardenal arzobispo de Sevilla, Carlos Amigo Vallejo, se ha distanciado de la posición adoptada por la Conferencia Episcopal ante las elecciones generales y autonómicas convocadas para el 9 de marzo.
En una entrevista concedida a Europa Press, Chaves reconoció que le ha sorprendido que los obispos se hayan pronunciado previamente a la confrontación, ya que "no es verdad que lo hayan hecho con la intencionalidad política con que se han pronunciado en esta campaña".
"Se han pronunciado sobre temas que están en el debate político entre la derecha y la izquierda, entre PSOE y PP, con un pronunciamiento claramente favorable a las posiciones del PP", resaltó el presidente de la Junta, que señaló que ha quedado claro que el objetivo de los obispos era posicionarse del lado del PP.
En este sentido, Chaves no dudó en destacar que los obispos tienen derecho a pronunciarse, ante lo que advirtió: "Pero también tienen que someterse y estar sujetos a las críticas, con respeto, pero como todo el mundo".
Así, dejó claro que el PSOE nunca se ha opuesto a que los obispos den su opinión y se pronuncien, por lo que acusó de "manipular" a los que dicen que los socialistas no aceptan que los obispos opinen.
Respecto a la relación que debe mantener el Gobierno con la jerarquía de la Iglesia, Chaves subrayó que son los obispos los que "están intentando condicionar las relaciones con el Gobierno a partir del 9 de marzo y no el PSOE".
