Parto de la premisa de que si fuera representante de jugadores, muy posiblemente, por no decir seguro, actuaría de una forma muy similar a como lo hacen ellos. Ahora bien, como no estoy en esas trincheras, tengo la oportunidad de manifestarme sobre los contratos de los futbolistas en las sociedades anónimas en las que se convirtieron hace años los clubes de fútbol, a excepción del Real Madrid, el FC Barcelona, Athletic de Bilbao y el Club Atlético Osasuna, que actúan de la misma forma que el resto de equipos en todo caso.
Cumplimiento relativo. Si el futbolista que firma el contrato con el club correspondiente resulta que no juega por su bajo rendimiento o por no estar a la altura de las expectativas en las que se le fichó, entonces los contratos están para cumplirlos. Si el jugador hace una gran temporada, explosiona en el aspecto goleador y el rendimiento es espectacular, comienzan los movimientos de sus agentes y buscan todos los resortes posibles para su marcha.
Luis Fabiano y el Mundial. Entrando en el caso concreto del delantero nervionense de Luis Fabiano, hay un añadido que es favorable al Sevilla, si es que de verdad no busca una mejor oferta para traspasarlo a otro club. El jugador brasileño tiene por delante un Mundial el próximo verano en Sudáfrica y sabe, tanto él como su agente, que fue el que lo lanzó a los cuatro vientos, que ha de jugar de forma satisfactoria para que Dunga, seleccionador brasileño, siga dándole la camiseta con el número '9' de la selección canarinha. Así que pongan en la balanza el dinero y las prestaciones en una larga temporada, porque del rendimiento tendrá que ocuparse Luis Fabiano para estar en la selección de Brasil en el Mundial de Sudáfrica, que es su verdadera meta.
