La ola de frío y viento ha dado una tregua durante esta semana a la ciudad, cansada de esas noches muy desagradables de mínimas que alcanzan hasta los 2 grados. La ciudad casi se hiela. Menos mal que llegó el anticiclón, que ha hecho que las temperaturas mínimas hayan subido poquito a poco, mientras que las máximas se van a situar entre los 13 y los 19 grados casi todos los días de esta semana.
Uno de los tics más repetidos cada mañana se produce al salir de la casa a la calle, y es mirar el cielo con el deseo de que el Sol vaya apretando un poquito más. Porque el invierno es quizás la estación que peor llevan los sevillanos: “Con el frío no sabes qué ponerte. No creo que estemos preparados para estas temperaturas tan bajas. Y cuando llueve ya está, te destroza todos los planes del fin de semana”, comenta Noelia Pérez, una pedagoga de 36 años que prefiere el calor al frío porque le da menos pereza y más ánimo para hacer las cosas.
El 2 de febrero se celebró en países como Canadá y EEUU el Día de la Marmota, un acontecimiento muy popular por aquellos lares. Ese día la protagonista es una marmota que tiene el difícil rol de diagnosticar el tiempo que queda para que se termine el invierno y así alcanzar la esperadísima primavera. Pero ¿realmente el frío es un factor deprimente para los sevillanos? Hemos ido a comprobar lo que opina el personal.
Yaiza Darías, una joven azafata de 32 años, piensa que en Sevilla da igual el tiempo que hace, ya que ella siempre encuentra un plan diferente y adecuado con el día: “A mí no me gana el cielo. Si sale el Sol, voy de cervecitas al mediodía y procuro siempre que el bar tenga donde recogerse por si la lluvia quiere hacer de las suyas.” Justo lo contrario que Almudena Jiménez, que prefiere el frío porque el calor le marea y le agobia. Es estudiante de Derecho, tiene 24 años y asegura que con el frío se pueden hacer muchas cosas, como ir al cine, quedar en una bolera o tomarse unas copitas en casa con los amigos. Cuando hace mucho calor, dice, le cuesta más trabajo quedar.
Manuel Guzmán Rodríguez, de 19 años, comparte la opinión de Almudena y cuenta que su remedio para afrontar el frío es hacer deporte e ir a correr al aire libre. Joaquín Bustos es amigo de Manuel, tiene 20 años y para él cualquier temporada es ideal para disfrutar con su familia. Con el frío toma todo lo que puede calentito para entrar en calor: “Los cafelitos son muy importantes para arrancar bien el día si no estamos bien alimentados”.
A Alberto Marín y Nazaret les encanta el calor y están hartos de tanto viento y lluvia. “Me refugio en casa o sitios cerrados. Generalmente, con el frío, no se puede hacer nada porque no se está cómodo en ninguna parte aunque te pongas lo máximo”, explica Alberto, y Nazaret añade que prefiere el calor porque “los días son más largos y se pueden hacer mil cosas, como ir a la piscina y nadar, pasar una tarde de compras en el centro comercial o tumbarse en el césped a tomar el sol. Es lo que más me gusta”.
Sólo queda añadir que quedan cinco semanas para que llegue oficialmente la primavera. Así que a disfrutar lo que queda de invierno si ustedes son amantes de las bajas temperaturas y para todos los además ¡ya queda menos!
