Dos administraciones con solera, la madrileña Doña Manolita y la barcelonesa Valdés, y otras primerizas en esto de dar premios, como la del centro comercial asturiano Parque Astur en Corvera o la de Torrelavega (Santander), fueron las responsables de la suerte repartida con el tercer premio, el 10.104, uno de los más madrugadores ya que salió a las 9.47 de la mañana.
El tercer premio de este Sorteo de Navidad se repartió entre cuatro comunidades autónomas: Madrid, Asturias, Cantabria y sobre todo Cataluña, ya que además de la popular administración Valdés, ubicada en Las Ramblas de la capital, también se vendió el número en Sant Joan de Vilatorrada, Puig-Reig y el aeropuerto de El Prat.Muchos trabajadores del centro comercial Astur resultaron agraciados ya que 19 series del tercer premio -9,5 millones de euros- fueron vendidas "décimo a décimo" en la administración del mismo, aunque también viajó vía internet a Canarias, según explicaron los loteros Gonzalo y Noelia Menéndez, quienes abrieron su establecimiento hace siete años y es el mayor premio que ha repartido hasta el momento y "en Navidad hace más ilusión".También Sonia Guitart, que regenta la administración número 1 de Puig-Reig, se estrenó ayer dando un premio en el Sorteo de Navidad -49,5 millones de euros de 99 series- tras 23 años vendiendo décimos, y se mostró especialmente "contenta" por hacerlo "en un año de crisis", al igual que los dueños del despacho número 3 de Torrelavega, encantados de haber repartido suerte a sus clientes "que se lo merecen todo" por haber "depositado su confianza en esta administración desde hace un montón de años", relataba ayer Alonso Astulez. Varios de esos fieles clientes se acercaron a felicitar a sus loteros, aunque a ellos no les hubiera caído nada, mientras éstos intentaban averiguar exactamente cuánto habían repartido, porque entre atender a unos y a otros no les había dado "ni tiempo de mirarlo". Muchos vecinos y curiosos se acercaron ayer a estas administraciones, pero ningún premiado. Los loteros coincidían en señalar que al haberse suministrado en ventanilla, la suerte estaba muy repartida.
Quien no pudo ocultar su identidad, pues para algo trabaja en un medio de comunicación, fue Encarna Díaz, limpiadora de El Periódico. Si ya es difícil ganar una vez en la lotería, y casi imposible hacerlo dos veces, lo de Encarna sólo ocurre una vez en la vida. En el sorteo de ayer resultó doblemente afortunada pues, además de dos décimos del 10.104 comprado en Las Ramblas, llevaba otro de uno de los cuartos premios, el 29.013 que salió el primero, con lo que en total se fue a casa con 140.000 euros más en el bolsillo. Fue su hija quien la llamó para darle la noticia y al poco se convirtió en protagonista de la portada en la página web del diario catalán.La única administración de lotería de San Joan de Vilatorrada, una localidad barcelonesa de unos 10.000 habitantes, era ayer una "algarabía". Su joven lotera, de apenas 22 años, María del Carmen Garrigó, repartió 15 millones de euros que fueron a parar, además de cuatro series vendidas en ventanilla, al club de baloncesto del municipio y a la escuela de Manresa Mare de Deu del Pilar en forma de papeletas. Hasta el despacho de Garrigó sí se acercaron tanto curiosos como algún que otro afortunado, entre ellos los jóvenes baloncestistas que entre cava y cánticos anticipaban por la mañana la fiesta que ya preparaban para la noche en el pabellón deportivo de la localidad. Y aprovecharon para reclamar a su presidente, la mano inocente que les llevó la suerte al ser quien eligió el número, que aproveche el premio para hacer algunas reformas en el vestuario y en el pabellón, como poner calefacción en el banquillo. Ayer acapararon tanta atención mediática como Gasol.
