Finalmente, será el Alcázar y no el Espacio Santa Clara el escenario de la anunciada exposición de Luis Gordillo que inicialmente iba a ser la siguiente a la frustrada de Carmen Laffón, que recorrerá la trayectoria del pintor sevillano desde los años 60 hasta la actualidad a través de uno de los leit motiv de su obra:los bustos y cabezas. Medio centenar de pinturas, esculturas y bocetos preparatorios de aquellas componen la muesta Cabezas. Luis Gordillo en el Real Alcázar, que podrá verse en el Salón Alto del Apeadeadero del Palacio Real del 16 de octubre al 9 de enero de 2015, con un montaje diseñado por el hermano del pintor, José Manuel.
Las obras procederán de museos como el Reina Sofía de Madrid, el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo o la Fundación Suñol de Barcelona, además de colecciones particulares y otras que están en posesión del propio artista, según explicó el alcalde, Juan Ignacio Zoido, durante la firma del convenio de colaboración con el director territorial de Caixabank, Rafael Herrador, y el presidente de la Fundación Cajasol, Antonio Pulido, patrocinadores de la muestra a través de la Obra Social La Caixa con un presupuesto de 100.000 euros.
Si Pulido aludió a que posiblemente esta muestra sea «una de las últimas» de Gordillo (Sevilla, 1934) aunque luego rectificó, Zoido hizo hincapié en el homenaje que su ciudad le hace a uno de los principales «referentes de la creación pictórica de las últimas décadas» y «uno de los modelos más recurrentes para los jóvenes artistas».
Hace diez años, con motivo del 70 cumpleaños del artista, la Casa de la Provincia acogió la exposición Pre-Gordillo goes to Paris, una colección de 150 obras centrada en los inicios de la trayectoria del artista incluyendo sus estancias en la capital francesa. La muestra que llegará en octubre al Alcázar exhibe obras de un Gordillo ya consagrado y la «elección de las cabezas como argumento responde al deseo de mostrar una de las presencias más habituales en su obra, a veces en primer plano y otros como contexto», su-brayó el alcalde.
Así, la muestra comenzará con un bloque que incluirá las primeras cabezas pintadas por Gordillo a mediados de los 60 para seguir luego con obras de los 70 y 80 y un apartado especial dedicado a las creaciones de las últimas décadas, «más esquemáticas». Además de cuadros y esculturas, principalmente bustos, la exposición incluirá borradores así como material «textual y gráfico» preparatorio del proceso creador. Zoido subrayó que muchas de estas obras son «desconocidas» para el gran público ya que proceden de colecciones particulares y de la del propio artista, y otras no han sido expuestas desde hace tiempo.
La entrada a la exposición será gratuita y si Caixabank y la Fundación Cajasol costean el montaje, el Ayuntamiento además de ceder el espacio del Alcázar (especialmente cotizado en esas fechas con el rodaje previsto de Juego de Tronos también en octubre) se encargará de la edición del catálogo. El hermano del pintor bromeó con Zoido sobre lo ocurrido en una exposición en Vitoria, que éste fue editado una vez terminada la muestra. «Eso aquí no pasa», aseguró el regidor.
Tanto Pulido como Herrador subrayaron que aunque en tiempos de crisis la mayor parte de los esfuerzos de la Obra Social de La Caixa se destinan a fines sociales, no olvidan su «compromiso con la cultura» con proyectos como éste o el previsto en las Atarazanas. Según explicaron, está a punto de acabar el periodo de alegaciones para que el arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra adapte el proyecto inicial antes de que el Caixaforum se traslade a la Torre Pelli.
