Estado en el que ha quedado la luna delantera del autobús siniestrado tras el impacto. / El Correo
Una joven estudiante estadounidense se encuentra ingresada en el Virgen del Rocío con pronóstico grave, después de que ayer fuera atropellada por un autobús de Tussam, cuyo conductor arrojó un resultado positivo en cocaína en la prueba de detección de droga. El suceso ocurría a primera hora de la mañana, a las 7.30 horas, en la calle Torneo, cuando la chica cruzaba en dirección al río para practicar deporte. Tussam no ha tomado ninguna medida contra el chófer hasta contar con informes definitivos de Toxicología, que tiene ahora que analizar su saliva.
El atropello ocurrió en Torneo a la altura de la calle Narciso Bonaplata, en el tramo entre la calle Baños y Calatrava, en la zona del carril bus, según confirmaron fuentes del Ayuntamiento. Eran las 7.30 horas de la mañana y la joven, identificada como M.L.W., cruzaba para salir a correr al Paseo Juan Carlos I, junto al río. El vehículo, que cubría la línea C1, chocó con la chica, desplazándola varios metros desde el lugar del impacto. Como consecuencia resultó herida grave por lo que fue trasladada al Hospital Virgen del Rocío, donde fue ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos de Urgencias. Por la tarde, su pronóstico, según las mismas fuentes, era que se encontraba estable.
La Policía Local se desplazó rápidamente hacia el lugar, donde comenzó a tomar declaración a los diferentes testigos, entre ellos, los propios viajeros que en ese momento iban en el autobús. Igualmente, los agentes recabaron los primeros datos para realizar el atestado, que determinará cómo ocurrieron los hechos. Por el momento, se desconoce si la joven cruzó indebidamente o si el autobús se saltó algún semáforo o iba a una velocidad indebida. Todos estos datos están siendo recabados por la Policía Local, que ha realizado ya mediciones y las posibles frenadas, para poder averiguar en el punto exacto en el que se produjo el impacto y así poder determinar las causas y quién es el responsable.
Cocaína. Los agentes también realizaron al conductor la prueba detectar el posible consumo de drogas, conocida como drogotest, que arrojó un resultado positivo en cocaína. No obstante, y como recordaron las fuentes, se trata de una prueba que arroja un resultado «indiciario», ya que, tal y como establece el protocolo, la saliva extraída al chófer será enviada al Instituto Nacional de Toxicología para su análisis tras lo que ofrecerá los resultados definitivos. Por su parte, el conductor negó «rotundamente» haber consumido droga, ya que dijo que «nunca» las había probado. Por este motivo, solicitó que se la practicase un análisis de sangre, cuyos resultados se desconocen aún.
Tussam ha decidido apartar al chófer de las labores de conducción, aunque fuentes sindicales aseguraron que se ha trasladado a «incidencias», es decir, a un turno para sustituciones de otros conductores o para refuerzo de líneas. En este sentido, las mismas fuentes explicaron que el protocolo habitual «cuando hay algún incidente es trasladar al chófer de línea». Igualmente, no pudieron precisar si el conductor se ha dado de baja laboral, sólo que éste requirió asistencia médica por un cuadro de ansiedad.
Tanto Tussam, como el comité de empresa se mostraron sorprendidos con el resultado del drogotest, pues «es un trabajador que lleva 15 años en la empresa y tiene un expediente intachable», dijeron fuentes municipales. Por su parte, el presidente del comité de empresa, Fernando Sojo, aseguró que «es un trabajador ejemplar» y pidió que no se sacaran conclusiones «hasta que no estén los informes definitivo».
Pero la parte más complicada que tuvieron que afrontar ayer los agentes fue la identificación de la víctima, ya que como la chica había salido a correr no se llevó ningún documento que permitiera conocer algún dato de ella, ni tampoco su móvil. Los agentes indagaron por la zona para averiguar si alguien la conocía y se pusieron en contacto con el hospital y el resto de cuerpos de seguridad por si algún familiar llamaba preguntando por ella. Al final, supieron que la joven es de Minnesota (EEUU) y que estaba en la ciudad por un intercambio, después de que su familia de acogida la echara de menos y se pusiera en contacto con el colegio, que fue el que llamó al Virgen del Rocío, donde le confirmaron que la chica estaba allí, y el que se puso en contacto con su familia en EEUU.
