En Sevilla hay unas 1.250 plazas de Policía Local, de las que alrededor de 1.130 están cubiertas. La reestructuración del Cuerpo para reforzar los distritos y crear la nueva unidad que se encargará de vandalismo y botellonas requerirá más plantilla. Ya hay una propuesta sobre la mesa: cubrir vacantes y crear 213 puestos.
La propuesta, que fue remitida por la Delegación de Convivencia y Seguridad a los sindicatos el pasado lunes, supone un incremento de la plantilla de alrededor del 17% para afrontar la reestructuración interna de la Policía. De estos puestos, la mayor parte serán para agentes -unos 150-, mientras que habrá más de 30 plazas para oficiales y 20 de la escala de mandos. La práctica totalidad de estos nuevos policías se incorporará a las estructuras que se crearán en los distritos policiales. Según el documento entregado a los representantes de los trabajadores, a cada una de estas sedes se sumarán de media unos veinte agentes.
Los distritos conforman la principal reforma introducida por el Consistorio en la Relación de Puestos de Trabajo de la Policía. El Cuerpo pasará de tener seis sedes en los barrios a contar con once -una por cada distrito administrativo-. Además, empezarán a abrir por las noches y a asumir materias como la seguridad nocturna -en ninguno de los documentos de trabajo aparece de momento la actual Unidad de Intervención Nocturna-. "Se diseñan como entidades territoriales de gestión, como pequeñas jefaturas autosuficientes", recoge el primer borrador elaborado en octubre por la Delegación de Seguridad. Entonces se planteaba que sería necesario asignar a los distritos 100 agentes más de los 456 actuales. Pero fue antes de aprobar la creación de cinco sedes policiales más, lo que ha incrementado los recursos humanos necesarios. Según los datos difundidos por el Sindicato Profesional de Policía Sppme, los efectivos de los barrios oscilan entre los 80 de Macarena y los 40 de Triana-Los Remedios.
El segundo eje de esta reforma absorberá en menor medida las nuevas plazas de Policía que se crean. Es la conocida como Área de Operaciones. Ésta incluye la Unidad de Intervención -la denominación Torre del Oro se volvió a guardar tras recuperarla a finales del pasado año- que se encargará principalmente de las botellonas y el vandalismo, así como otros grupos como el Diana, la Línea Verde o el Grupo Giralda. Según la previsión inicial, requiere de más de 438 agentes, una cifra que se alcanzará principalmente a través de una reestructuración interna, pendiente aún de su definición en las próximas reuniones de trabajo.
Desde el área de Convivencia, que dirige Alfonso Mir, subrayaron la "actitud positiva" de los sindicatos y destacaron que el incremento de la plantilla -que debe aún cerrarse con los policías- se ejecutará en varias anualidades. El objetivo de la delegación es reforzar los distritos con el nuevo modelo de policía de barrio y la escala intermedia de mandos técnicos.
