Ya sea para recordar el territorio en el que uno pasó la niñez, saber dónde estaba la linde de una parcela o comprobar el recorrido de una vía, el Instituto de Cartografía de Andalucía edita en DVD la cartoteca en la que trabaja desde hace más de 20 años.
Desde los años ochenta, un centenar de personas ha analizado los archivos que se guardaban en España y en el extranjero. Son mapas centenarios, uno de los más antiguos, de la ciudad de Carmona, está fechado en 1550 y otro, el de El Garrobo, se realizó tres años después.
Los expertos buscan recuperar con ellos las referencias cartográficas de Andalucía. Este archivo sirve de base para la planificación urbanística actual, ver su evolución o ayudar a los más curiosos a conocer el pasado de su tierra.
Entre los usuarios del servicio, está el navegador Google Earth que, al igual que Cataluña y Canarias, tiene un acuerdo con el Instituto Cartográfico de Andalucía para poder utilizar las ortofotografías y mostrar con ellas la tierra en tres dimensiones.
Toda la información está en internet a un golpe de ratón en la web del Instituto de Cartografía de Andalucía y el día 29 se presentarán seis nuevas publicaciones en distintos formatos -entre ellos en DVD- como el Catálogo digital de cartografía histórica de la provincia de Sevilla.
El catálogo, actualizado a 2007, tiene unas 21.000 referencias cartográficas entre los mapas de Sevilla -el grueso del catálogo- los de las provincias colindantes y los de Andalucía.
Como explican desde el Instituto de Cartografía de Andalucía, la cartografía de la provincia cuenta con particularidades que la distinguen del resto de Andalucía. En los mapas más antiguos la provincia está aún comprendida dentro del Reino de Sevilla, junto a las de Huelva y Cádiz, hasta que se separan en 1833 tras la división administrativa promovida por Javier de Burgos, entonces secretario de Estado de Fomento y quien ideó la división por provincias.
evolución. Los mapas de aquella época llaman la atención no sólo por su estética, "los conceptos cartográficos han evolucionado: antes no reproducían sólo territorios, sino que los acompañaban de información complementaria, como la política o el tipo de vías", explica Rafael Martín, director del Instituto de Cartografía de Andalucía. Los mapas de ayer se siguen utilizando hoy, por lo que los expertos están revisándolos "para establecer totalmente los límites".
El Instituto de Cartografía de Andalucía, creado en 1993, la conserva y la difunde "tanto por su valor como fuente de información, como por su valor de patrimonio documental". Y el mismo propósito tiene la recopilación de la cartografía histórica de Andalucía, territorial y urbana, que inició la Consejería de Obras Públicas en 1987 y que cuenta con un fondo de más de 180.000 imágenes en blanco y negro de unos 140.000 mapas, planos y vistas catalogados. Están destinados a que las administraciones, los investigadores y los ciudadanos conozcan los datos históricos territoriales y urbanos que contienen los mapas antiguos.
En 1995 se publicaron los dos primeros catálogos de cartografía histórica, de las provincias de Huelva y Cádiz, y a los que sigue la edición de Málaga. La serie digital ofrece una versión actualizada del catálogo y las imágenes en blanco y negro de cada uno de los mapas que se podrán visualizar para comprobar la información que se busca "y que la ficha catalográfica nunca llegará a describir por muy completa que sea", según enfatizan los expertos.
Dentro del territorio de la provincia de Sevilla, el valle inferior del Guadalquivir y su cauce ha dado material para una abundante cartografía debido a las cortas y a otras obras para mejorar su navegabilidad, para la defensa contra inundaciones o la canalización para el regadío.
Sevilla, además, se constituye en uno de los primeros nudos ferroviarios de conexión con las cuatro provincias colindantes y con Extremadura, además de las líneas de ferrocarriles mineros.
Resulta curioso que, a pesar de su relevancia, la capital hispalense tiene su primer plano urbano en fecha muy tardía, 1771. Sevilla se resarció años más tarde con la celebración de la Exposición Iberoamericana de 1929, evento que transformó la ciudad y quedó registrado en una serie importante de cartografía que hoy se guarda en la Hemeroteca y en Archivo Municipal de Sevilla.
La provincia tiene mapas de finales del siglo XIX y principios del XX de los núcleos urbanos principales y secundarios, así como información planimétrica de caminos y vías pecuarias de finales del XIX y el parcelario catastral de la mayoría de los municipios de mediados del XX.
Tanto en el DVD como en la web, se puede realizar la búsqueda de mapas partiendo de los nombres de los términos municipales, los cascos urbanos o los partidos judiciales. También se puede utilizar un intervalo cronológico, el autor de la obra o combinar distintos términos. "Se disfruta viendo el terreno", asevera el experto, "y cualquiera que nos pueda orientar a una nueva fuente, que nos avise, seguimos investigando".
