El niño de cinco años que resultó herido en la noche del pasado sábado después de sufrir en su propia casa un ataque por parte de dos perros, de la raza rottweiler, permanece "estable" dentro de la gravedad, aunque continua ingresado en la Unidad de Vigilancia Intensiva (UVI) del Hospital Materno Infantil de Málaga, según apuntaron ayer fuentes del centro.
Los hechos tuvieron lugar en una vivienda de una urbanización de la localidad de Alhaurín de la Torre, cuando los canes se abalanzaron sobre el menor, realizándole mordeduras en la cara, la cabeza, las piernas y la espalda.
Al parecer, el padre del niño fue el que consiguió separar a los perros del pequeño, mientras que sanitarios del centro de salud de la localidad le prestaron los primeros auxilios.
