El Papa volvió a tener ayer una jornada frenética. Visitó a la familia real, donde tanto el Rey como el Pontífice mostraron su preocupación por los problemas de la juventud y la necesidad de buscar salidas; tuvo un encuentro con religiosas y profesores universitarios jóvenes en El Escorial; recibió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; y presidió el Víacrucis de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) .
En el acto ante más de un millar de profesores arremetió contra la visión "utilitarista" de la educación que cunde en la actualidad. "Sabemos que cuando la sola utilidad y el pragmatismo inmediatos se erigen como criterio principal, las pérdidas pueden ser dramáticas: desde los abusos de la ciencia sin límites, más allá de ella misma, hasta el totalitarismo político que se aviva fácilmente cuando se elimina toda referencia superior al mero cálculo del poder", dijo.
Por eso, mientras rememoraba sus primeros pasos como profesor en Bonn, cuando "todavía se apreciaban las heridas de la guerra" y las "muchas carencias materiales" se suplían con la "ilusión por una actividad apasionante", se preguntó dónde encontrarán los jóvenes esos puntos de referencia "en una sociedad quebradiza e inestable".
Asimismo, dijo que los jóvenes necesitan auténticos maestros, "personas abiertas a la verdad total en las diferentes ramas del saber" y "convencidas de la capacidad humana de avanzar en el camino hacia la verdad".
Ante las 1.664 religiosas jóvenes, de las que 30 eran extranjeras y 400 de clausura, el Papa defendió la "radicalidad evangélica" de la vida consagrada frente al "relativismo y la mediocridad, surge la necesidad de esta radicalidad que testimonia la consagración como una pertenencia a Dios sumamente amado", dijo.
En este sentido, recordando uno de los mensajes de la JMJ, pidió a las religiosas que el encuentro personal con Cristo que nutre su consagración se testimonie con toda su fuerza transformadora en sus vidas. "Cobra una especial relevancia hoy, cuando se constata una especie de eclipse de Dios, una cierta amnesia, más aún, un verdadero rechazo del cristianismo y una negación del tesoro de la fe recibida, con el riesgo de perder aquello que más profundamente nos caracteriza", señaló.
Así, Benedicto XVI manifestó que esta radicalidad evangélica de la vida consagrada se expresa en la comunión filial con la Iglesia, con sus pastores y con cada familia religiosa, "custodiando su genuino patrimonio espiritual con gratitud, y apreciando también los otros carismas", y en comunión con otros miembros de la Iglesia como los laicos.
Con el presidente del Gobierno Benedicto XVI mostró su preocupación por el aumento de una ideología xenófoba que, a juicio de los dos mandatarios, "atenta contra los valores de libertad religiosa y convivencia característicos de la sociedad europea", en relación con los recientes sucesos ocurridos en Noruega. Según informó el Ejecutivo español, Zapatero y Benedicto XVI departieron también sobre la vigencia de los acuerdos entre España y la Santa Sede y las relaciones entre los dos estados. Asimismo, abordaron la situación económica en Europa, momento en el que Zapatero se comprometió a aplicar con eficacia las medidas de ajuste adoptadas por el Gobierno y de trabajar por una mayor gobernanza económica europea.
Finalmente, en el Víacrucis el Santo Padre solicitó a los jóvenes que no pasen de largo ante el sufrimiento humano. "Queridos jóvenes, que el amor de Cristo por nosotros aumente vuestra alegría y os aliente a estar más cerca de los menos favorecidos. Vosotros, que sois muy sensibles a la idea de compartir la vida con los demás, no paséis de largo ante el sufrimiento humano, donde Dios os espera para que entreguéis lo mejor de vosotros mismos: vuestra capacidad de amar y de compadecer", subrayo.
Por otra parte, el ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, almorzó ayer con el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone, al que encontró una "enorme comprensión" y "máxima receptividad" para transformar el Valle de los Caídos en un lugar de memoria reconciliada "que supere la imagen de un sólo bando que hasta ahora tiene", según informaron fuentes del Ministerio de Presidencia . Además, Bertone se interesó por el camino hacia la paz en el País Vasco, según Presidencia.
