Recreación virtual realizada por los promotores del proyecto Sevilla Park, ubicado junto al puente de las Delicias.
La noticia de que los gestores del Palacio de Congresos de Madrid quieren invertir 180 millones en Sevilla para levantar un complejo de ocio junto al puente de las Delicias con el mayor palacio multiusos de Europa para 21.000 espectadores, una sala más pequeña para 1.500 personas, una gran plaza pública para conciertos y cine de verano, una noria, bares, una terminal de cruceros, un aparcamiento en superficie para 4.000 vehículos y un bus fluvial, entre otros, ha sorprendido al sector musical porque el mercado está muy retraído a causa de la crisis y porque en Sevilla hay recintos que están infrautilizados, como el estadio Olímpico (que puede albergar eventos para entre 2.000 y 72.000 espectadores), el auditorio Rocío Jurado 8.000 o el cerrado de la SGAE en la Cartuja 3.500. Los empresarios dan la bienvenida al proyecto, pero muestran dudas sobre su rentabilidad en plena crisis y avisan de los posibles efectos en los otros recintos de la ciudad. «Bienvenido sea y ojalá sea real», es una de las frases que resume el escepticismo que ha suscitado.
Estadio Olímpico. Su gerente, Manuel Zafra, asegura que el nuevo auditorio «puede tener incidencia en el Olímpico, pero a tanto tiempo vista no se puede determinar». A su juicio, todo lo que sea sumar es positivo y el producto que ofertaría es diferente porque sería un recinto cubierto para giras de invierno, pero añade que en esta época de crisis si hay varias alternativas de ocio, el público tiene que elegir porque no puede pagarlo todo. «El mercado está retraído, se asumen pocos riesgos, se venden menos entradas, así que se va a productos cuajados, por ejemplo, los conciertos de Alejandro Sanz», explica. «En otro momento sí vinieron a Sevilla grandes giras, como la de U2, Madonna, AC/DC, Bruce Springsteen... pero ofreciendo condiciones económicas lo más beneficiosas posibles para los promotores».
la sgae. La Sociedad General de Autores yEditores mantiene su intención de poner a funcionar su auditorio de la Cartuja, ya concluido y con capacidad para 3.500 personas. El presidente de la institución, Jose LuisAcosta, asegura que siguen negociando con varias empresas para adjudicar la gestión del recinto, si bien no se atreve a aventurar cómo afectará la irrupción del futuro Sevilla Park en sus planes. «Supongo que si se crea otro auditorio afectará a la actividad del nuestro, pero no lo tengo muy claro. Dependerá de las características y los espectáculos que programe». Acosta no oculta su sorpresa ante la aparición de este grupo de empresas interesadas en construir el nuevo complejo. «Entiendo que los inversores habrán sopesado los riesgos para el proyecto y habrán hecho sus cálculos. No conocíamos nada sobre este proyecto y no podemos evaluarlo con ligereza», indicó. En cuanto a su viabilidad, consideró que «nadie se aventura a meterse en una empresa tan ambiciosa si no cree que le será rentable. Habrá que preguntarle a los promotores cuáles son sus cuentas.Sobre todo porque es un paso muy valiente en un momento muy complicado para el sector del entretenimiento y la cultura».
Green ufos. El responsable de la promotora musical GreenUfos, Santiago Cotes, también acoge con «extrañeza» la noticia. «Este tipo de eventos musicales de gran formato no es nuestro territorio. Nadie sabe todavía con exactitud qué hay detrás de esta iniciativa. En principio, no parece que ese auditorio sea necesario, pero si es una iniciativa privada, sin dinero público, no acabo de verlo mal, aunque desconozco si habrá más implicaciones urbanística en este asunto», señaló. A su juicio, la escala de público que baraja este nuevo recinto, de unas 20.000 personas, «puede ser interesante», si bien advierte de que «no puede haber espectáculos para 20.000 personas todos los días. Ahora bien, una empresa privada puede hacer lo que estime. Imagino que tendrán sus estudios. Aunque ni siquiera Fibes es capaz de llenar su auditorio en todas sus representaciones». Por último, recuerda que «el EstadioOlímpico tampoco hacía falta, y ahí está».
Auditorio Rocío Jurado. FranciscoCubero es uno de los promotores que trabaja dotando de contenido elAuditorio Rocío Jurado, uno de los espacios que más ha padecido la crisis económica, que ha desviado conciertos que antes requerían del aforo de 8.000 personas de este recinto hacia espacios como Fibes, de 3.000. «Llevo 12 años trabajando en Sevilla, y creo que ahora «sí existe una demanda por ese tipo de espacios». «Cuando llegué a esta ciudad sólo existía el Fun Club y todavía se sentía la resaca de la Expo92, que maltrató al sector de la música en directo imponiendo la filosofía del todo gratis. No había ni hábito, ni consumidores, ni salas. Ahora ha cambiado la película y una capital con un millón y medio de habitantes es rarísimo que no tenga espacios de ese tipo», dijo.
A su juicio, el Sevilla Park será un complemento. «ElRocío Jurado sólo puede programar de mayo a septiembre y nunca ha sido rentable. Hace años se planteó cubrirlo, pero ese proyecto cayó en el olvido. Ahora además competimos con Fibes, que nació para acoger congresos y que al final vive de la música».
Cubero considera que el sector volverá a repuntar: «Las grandes giras internacionales habían comenzado a incluir a Sevilla en sus itinerarios, y volverán a hacerlo cuando termine la crisis, porque es la cuarta o quinta ciudad de España, y es un destino que está por encima de Valencia y Zaragoza, porque abarca un radio de población mayor».
Riff Producciones. Su director, Carlos Espinosa, asegura que Sevilla tiene capacidad suficiente con el estadio Olímpico, el auditorio Rocío Jurado, Fibes y salas de conciertos como Custom, que gestiona, para recibir este tipo de eventos internacionales. «Bienvenido sea y ojalá sea real», apostilló tras advertir que el Olímpico no está rentabilizado al cien por ciento. «Si las giras de invierno son el problema porque no hay recintos cubiertos en Sevilla, ¿cuántas giras hay para llenar recintos de 20.000 personas? Para cuatro o cinco meses no sé si es necesario otro recinto porque el clima de Sevilla permite conciertos al aire libre casi todo el año, no es igual que Madrid, Barcelona o Bilbao», defiende Espinosa, que subrayó lo difícil que es ya vender 20.000 entradas. «Tener un auditorio de 20.000 personas cubierto no te garantiza que los Rollings vengan, se necesita un promotor que aporte cinco millones de euros, pero si quieren invertir 180 millones, pues adelante», concluyó.
