Jóvenes al día

El sueño de ser actor y triunfar entre decorados

La nueva cantera de jóvenes actores viene pisando fuerte a pesar de los efectos de la crisis y los recortes en cultura.

el 07 feb 2015 / 09:00 h.

weekend El teatro es una herramienta que lleva a la reflexión y nos hace sentir cosas y una de las formas artísticas más antiguas y primarias que conoce el hombre. El teatro es considerado una forma de arte que cuenta con varios elementos que tienen que ver con la subjetividad y la creatividad de los que toman parte de él: guiones o historias y sus modos de interpretarlas, los estilos pictóricos y el arte gráfico a la hora de establecer una escenografía, la música, el baile y muchos otros elementos que forman parte del teatro y lo hacen un fenómeno social muy completo y extendido. Nuestra comunidad cuenta con una cantera importante de actores y literatos que luchan por hacerse un hueco en este mundo simulado que tantas veces supera la dicotomía realidad-ficción y que no sólo nos entretiene, sino que también nos ayuda a reflexionar. La obra de teatro Weekend es una pieza de 45 minutos dirigida por el dramaturgo Jorge Cuadrel, en la que se trata el tema del consumo de alcohol entre los jóvenes y las consecuencias fatales que conducir bajo los efectos de esta sustancia puede traer consigo. La trama transcurre a través de las relaciones afectivo-sentimentales de un grupo de adolescentes que empiezan a vivir y la relación de uno de ellos con su madre. La obra fue representada ayer en el teatro del Centro Social Municipal Virgen de los Reyes de Sevilla ante varios grupos de chavales en edad académica. Al finalizar la representación, intérpretes y asistentes pudieron disfrutar de un coloquio con su director, en el que los espectadores preguntaron sus dudas, establecieron paralelismos con la realidad además de intercambiar impresiones sobre la trama y el trasfondo social de ésta. Weekend es una pieza que lleva funcionado hace 12 años. En esta ocasión, el Área de Salud del Ayuntamiento de Sevilla ha querido que la pieza llegue hasta los más jóvenes para, además de acercar el teatro a los chicos, hacerlos reflexionar sobre temas importantes de la vida. La obra nace como un homenaje a Alejandro, el hermano de un amigo del director de la obra, que falleció en un accidente de tráfico mientras regresaba a casa en moto tras haber consumido alcohol. Aunque la historia ha sufrido transformaciones a lo largo de los años, su objetivo sigue siendo el mismo: evitar consecuencias irreversibles que derivan de estas conductas de riesgo. Los personajes de la obra son: Ana Jiménez, una joven enamorada del chico duro del grupo (Edu Bulnes), Paz de Alarcón como la preocupada madre de Edu, y Macarena Rubio y Fernando Moreno, amigos de la pandilla. La trayectoria de cada uno de los actores es diferente, mientras Paz es la más veterana con una dilatada trayectoria en conocidas series de televisión, cine y numerosas obras de teatro, Ana es la benjamina del grupo. A sus 19 años, acaba de empezar su formación como actriz y ya debuta en su primera obra teatral, compagina su formación como actriz con sus estudios universitarios en Ingeniería Biomédica. Edu y Fernando, a sus 25 y 22 años respectivamente, comenzaron con su formación como actores hace siete años, desde entonces no han dejado de protagonizar papeles en innumerables obras de teatro. Macarena, por su parte, a sus 26 años además de una amplia trayectoria como actriz, también imparte clases de canto y ha lanzado un disco al mercado. «Desde pequeños siempre nos gustó el teatro, jugamos a actuar, era una necesidad que siempre tuvimos», destacan los jóvenes. Su primera toma de contacto con el teatro fue a través de obras en las que participaron en el colegio. Algunos de ellos destacan que de pequeños eran introvertidos, vergonzosos y pudorosos, pero con el paso del tiempo fueron trabajando esos aspectos hasta conseguir perder el pudor para actuar. «Lo que representamos encima de un escenario es el reflejo de una realidad, tienes que estudiarlo todo, desde la personalidad de la gente al alma humana, cualquier detalle… movimientos, posiciones, voces… En el momento en que empiezas a estudiar te vuelves más observador porque los personajes al fin y al cabo están en la calle», explican los actores. La formación –coinciden en señalar– es llevadera: «Se supone que te gusta y disfrutas con ello», aunque subrayan que la formación depende mucho del lugar donde se lleve a cabo, puede más práctica o más teoría. Plantean que el trabajo no deja mucho margen para vivir de forma holgada: «Es duro, tienes que decir que sí a todo al precio que te digan y eso es complicado. Llegas a un punto en que se aprovechan tanto que te dan ganas de decir no, no a cualquier precio. Hay compañeros de la profesión que prefieren poner copas a trabajar por cuatro duros. Pero después también piensas que al menos trabajas de lo que te gusta, aunque sea por una miseria». Reconocen que todo actor tiene su punto de ego, el ego es el centro del trabajo del actor: «Al final del cuento haces lo que todos quisieran hacer. A todos nos gusta que nos miren, nos reconozcan… pero hay que saber controlar ese egocentrismo, saber que te están valorando en tu trabajo, y no por ti, sino por tu personaje, cuando bajas eres uno más, la humildad tiene que formar parte del trabajo, sin humildad te terminas cayendo de forma inevitable».   LA ESCUELA DE TEATRO. Jorge Cuadrel es un argentino afincado en Sevilla desde 1994, fundó la escuela de teatro y compañía teatral Viento Sur, y en la actualidad ejerce como director del centro. A pesar de lo extendido del término interpretación, el dramaturgo prefiere hacer uso de actuación, ya que para él la interpretación conlleva una mediación mientras que actuación conlleva a encarnar orgánicamente al personaje. «A los actores hay que formarlos en la actitud, ya que la aptitud se puede desarrollar, pero lo importante es la educación y el respeto que necesita este arte para desarrollarse. Yo soy el que conozco y por el que soy conocido, y por eso es tan importante dedicarle una atención particular a esa actitud de respeto sea para sí o para los compañeros con los que trabajamos. Cuanto más amplia es la formación, mejor, todo aporta al hecho teatral. Ya sea de carácter vocal, musical, expresión física, danza, música, movimiento, interpretación de los textos…», explica el autor de Weekend. Indica que el panorama actual en la profesión se plantea difícil debido a los recortes existentes: «Por la falta de apoyo y también porque el público tiene menos dinero para asistir al teatro. No es que sean caras las funciones, sino que las personas han dejado de darle valor, no es una primera necesidad». Según Cuadrel, a la nueva cantera de jóvenes los caracteriza la vitalidad y la creatividad. «En Andalucía hay una cierta dificultad para el tema de la disciplina artística porque no hay tradición y además influye la cultura teatral en general, que hace que no tenga una buena crítica». Para él el teatro tiene que formar parte de la educación general y ser una materia obligatoria en los diferentes niveles de la educación porque forma a personas en el sentido más amplio de la palabra, permitiéndoles comunicar de otra manera, dándoles un valor al propio imaginario de investigación, etcétera. «Aunque en Andalucía en particular está madurando una nueva cantera de gente, las producciones nuevas están recibiendo con buen ánimo a la gente que trabaja aquí y que escapa un poco del cliché del guardia civil o del gitano, que era a lo que estaban condenados los actores andaluces», asevera. Para el dramaturgo, la proyección de trabajo fuera de Sevilla se está consolidando: «Antes todo el mundo quería irse fuera: Madrid, Barcelona… Pero ahora hay muchas oportunidades en esta ciudad también. No hace falta irse fuera para poder dedicarse al teatro. En esa línea, la proyección de futuro irá de la mano del impulso que los jóvenes andaluces están dando a la escena, yo creo que tienen unas posibilidades interesantes».   EL CASTING. Existen muchas empresas que se posicionan como intermediarias en la búsqueda de actores que ofrecen sus servicios a productoras y compañías de teatro. Es el caso de Figurasur, una agencia que nace para buscar soluciones en el mundo audiovisual y la publicidad, ofreciendo los servicios de casting e imagen que una producción necesite, así como búsqueda de localizaciones. Proporcionan actores, ayudantes de producción, modelos, figurantes, directores de casting, presentadores, speaker, magos, bailarines, celebrities. Explican que a la hora de realizar un casting hay que centrarse en el perfil buscado para que encaje no sólo físicamente, sino a nivel interpretativo. «No sólo nos demandan caras conocidas, también actores poco conocidos pero con grandes dotes para la interpretación», explica Reyes Aguilar, gerente de la empresa. Afirma que en los últimos años el sector se encuentra bastante resentido por la crisis: «Hace cuatro años se hacían muchas más cosas de las que podemos hacer ahora, a pesar de todo seguimos reinventándonos». Por último, el hecho de contratar a agencias de Madrid o Barcelona para actividades que se van a realizar en Sevilla perjudica a las empresas de casting locales y denuncia que cuando se va a rodar en la ciudad, los contratos no deberían venir subcontratados previamente.

  • 1