Intensa y extensa rueda de prensa la que ha protagonizado José Luis Galilea, director general y deportivo de Baloncesto Sevilla, que en la presentación de Kirk Penney, el flamante fichaje cajista, ha dado un repaso a los muchos frentes abiertos en la entidad verdirroja, que a la importante crisis deportiva, añade las dudas sobre su viabilidad de futuro, cuando el actual propietario, Jeffrey Meythaler, lleva semanas en Estados Unidos (en Denver, aclaró Galilea), en plena racha de derrotas que ha dado paso a una reconstrucción para salvar la situación.
Galilea dejó clara sus discrepancias con la forma de gestionar, o de no gestionar, de Meythaler, y a la cuestión de si está más satisfecho con el apoyo de Caixabank que con la del propietario, respondió afirmativamente. "Caixabank está detrás de todo lo que pasa en el club, no entiendo que haya gente que ponga en cuestión o critique cuando es la entidad que durante 27 años ha permitido que haya baloncesto de élite en Sevilla", y negó que haya problemas de pago en el club. "Todo el mundo está al día de cobro, y los empleados así lo pueden confirmar".
Sobre el futuro de la gestión y la propiedad de Jefferson Capital Funding, observó que "ya se verá a final de temporada, hay una serie de compromisos, pero yo soy un empleado del club, no sé que hará el propietario, él lo tendrá que aclarar".
Reiteró que "no tengo nada que ver con Jefferson Capital Funding, soy un empleado del club, mi contrato es con el club" y sobre si, como responsable de la situación por el que atraviesa el equipo se ha planteado la dimisión dijo que no "porque no sería beneficioso" y sobre las decisiones de las que se arrepiente desde su llegada al equipo citó la salida de Scott Bamforth.
Sobre la salida de Scott Roth, sobre el que dijo que tenía ya arreglada el trámite para conseguir la licencia como entrenador en España, manifestó, en primer lugar, que "el primer perjudicado de que siguiese de entrenador era yo, pero también yo era el que más información tenía sobre su trabajo. Estoy convencido de que los problemas, las carencias del equipo eran otros, y no ha tenido la oportunidad de trabajar con las incorporaciones".
Sobre el fichaje de Luis Casimiro dijo que "es decisión de club como todo, no es cuestión de ponerse medallas, es en pro de que el club se salve", y explicó que a la hora de fichar "siempre hay varias negociaciones distintas, ocurre en todos los clubes" y que "no siempre se ficha a quien quieres fichar, depende del dinero y del mercado".
Y sobre la polémica con las peñas, que decidieron romper relaciones con el club, tras el incidente con miembros de La Keka, que se trasladaron de su fondo habitual hasta el opuesto para expresar sus críticas a Galilea, dijo que fue "un incidente aislado", y que ha habido reuniones para normalizar la situación. "Como en el teatro o en cualquier espectáculo, no puedes dejar tu localidad para ocupar otra que tú quieras, no es una cuestión mía y no hubo nada detrás. Necesitamos que todos rememos en la misma dirección".
Sobre el fichaje de un pívot, aseguró que esperará a que Casimiro dé su opinión y exprese las necesidades que ve en el equipo, y negó contactos con Germán Gabriel, que se ha desvinculado de Bilbao. "Es un jugador interesante, pero hay muchos jugadores interesantes".
De Penney dijo que "es un jugador con muchísima experiencia que se ajusta a lo que buscaba el club, tanto en calidad como para compensar la juventud del equipo. Conoce la Liga ACB y se le agradece la paciencia que ha tenido, y que haya aceptado venir en una situación tan complicada".
Penney manifestó que "es un honor estar aquí, en un club que lleva tantos años en la ACB. Para mí esto es un reto no solo por la situación deportiva, sino estar rodeado de tantos jóvenes buenos. Tenemos la oportunidad de hacer que esta situación cambie y daré lo mejor de mí para ayudar al equipo".
