La selección de Italia, actual campeona del mundo, pasa tan sólo un año después por un momento crucial, ya que se encuentra al borde del abismo de la eliminación de la Eurocopa 2008, que quedaría confirmada si cae ante Escocia en Hampden Park.
El equipo de Roberto Donadoni es tercero del grupo B con 23 puntos, a dos de Francia y a uno de Escocia, cuando le falta visitar al conjunto británico y recibir a Islas Feroe. Con el país aún en estado de shock después de los graves disturbios de la pasada jornada, los azzurri se presentan en el templo del fútbol escocés con la necesidad imperiosa de no sufrir su segunda derrota de la fase previa.
Francia debe asegurar el billete continental el miércoles en Ucrania, ocurra lo que ocurra en Glasgow.
Inglaterra es otro grande en apuros. El sábado jugará un amistoso ante Austria y estará muy pendiente del Israel-Rusia. Con Croacia cerca de sellar su pase en Macedonia, Inglaterra es segunda con dos puntos más que los rusos, pero con un partido más. Si Rusia vence, adelantará a Inglaterra.
Temiéndose lo peor, la maquinaria mediática inglesa se centra ya en el nuevo fracaso de Steve McClaren.
Polonia y Portugal encabezan el grupo A y tratarán de certificar su pase ante Bélgica y Armenia, respectivamente, lo que truncaría cualquier intento de la Serbia de Javier Clemente.
Grecia, líder del grupo C y defensora del título continental, ya tiene el pase garantizado. El interés se centrará en Oslo, donde Noruega y Turquía se jugarán la otra plaza. Los nórdicos tienen dos puntos de ventaja.
Holanda lo tiene muy bien para unirse a Rumanía como clasificados del grupo G. Al cuadro de Marco van Basten, segundo con cuatro puntos de ventaja sobre Bulgaria, le basta con derrotar en casa a Luxemburgo.
