"La clave es el puerta a puerta", afirma José Luis Vidal (Almadén de la Plata, 1947), quien, tras cuatro años en la oposición y una vez solventado un proceso judicial, vuelve al sillón de alcalde, cargo que ya desempeñó durante ocho años. Los cinco concejales obtenidos por el PP le daban de nuevo el mando en este tranquilo pueblo de la Sierra Norte. A diferencia de su hermano gemelo, Joaquín Vidal, presidente de la Federación de Víctimas del Terrorismo, José Luis siempre desarrolló su actividad en el ámbito estrictamente municipal.
-Con su larga trayectoria, ¿aprecia muchos cambios en la forma de hacer política local?
-La asignatura pendiente que queda es la política local. Se derivó la gestión central a la autonómica, pero éstas no acaban de soltar la gestión a los consistorios. Está pendiente el pacto local, los alcaldes dependemos de la Junta de Andalucía. Hay muchas cosas que atender en los municipios, pero no hay soporte para esa cantidad de funciones que un ayuntamiento tiene que realizar.
-¿Cómo se ha encontrado las arcas municipales de Almadén?
-Como casi todas. No se puede trabajar. Es para entregar las llaves a la Junta. Peligra el pago de nóminas y a proveedores. Es algo inaguantable. Además, en un pueblo la gente viene en busca del alcalde y no se puede correr, o echar la culpa a otro. Hay que responder e intentar dar soluciones.
-¿Ha solicitado las ayudas de ese fondo extra de la Diputación?
-Sí, esperemos que el reparto sea equitativo y que todos los ayuntamientos cojamos parte del dinero para pagar nóminas. Me he encontrado, por ejemplo, con una escuela taller que está en marcha y el anterior alcalde se ha gastado ya el dinero, pero tengo que seguir pagando las nóminas que están pendientes desde junio.
-¿Qué proyectos tiene en mente para el municipio?
-Estamos trabajando para construir un centro de biomasa, pero el primer proyecto es el que ya dejamos hecho: el observatorio astronómico. Se podría decir que es el mayor de Europa a nivel divulgativo. Lo dejamos funcionando, pero el anterior alcalde lo cerró. Además, hicimos un área de acampada en la Traviesa, con restaurante, dos piscinas y bungalows, pero no se inauguró. La anterior corporación también abandonó el proyecto. Aquí hay una gran riqueza medioambiental y turística, con mucho monte y tranquilidad, algo que demanda el ciudadano de la capital, que está a poco más de 30 minutos.
-¿Hay fecha para reabrir el Observatorio Astronómico?
-Los telescopios grandes estaban tirados en la calle y cinco cúpulas están prácticamente destruidas. El centro está en estado ruinoso y es incalculable lo que costará repararlo. Se ha contactado con la Asociación Astronómica y trataremos de ponerlo en servicio lo antes posible. Aquí se le ha hecho un perjuicio al pueblo y, por ello, denunciaré los hechos y pediré responsabilidades.
-Además del turismo, ¿qué otras áreas se van a impulsar?
-El PP ya inició la Feria del Jamón. Estamos en el límite de la provincia de Huelva y Badajoz, donde se sienten los aromas de la chacina. Esto no es una feria de diversión, sino de promoción. El anterior gobierno no entendía que no sólo se crea riqueza en la feria, sino todo el año: hay miles de visitas que volverán a comprar los productos que probaron. Por otro lado, está la Feria Cinegética, que pondremos de nuevo en valor. La caza es importante. Estamos en Sierra Morena. Era de las primeras ferias de rehalas de España por participantes y se celebrará el día 9 de octubre.
-¿Le cuesta olvidar ese juicio con Egmasa por el que fue condenado y finalmente absuelto?
-Estuve ocho años de juicios por la querella de la Junta, prácticamente mis dos legislaturas como alcalde. Hubo dos sentencias condenatorias, pero fui absuelto al final. No di una licencia en Las Navas-Berrocal porque simplemente no se reunían las condiciones legales para ello.
-¿Cómo llevó ese proceso?
-Fue un ataque directo de la Junta de Andalucía al ser un alcalde del PP. Todo lo que sea tema judicial desgasta y cuando la gente oye prevaricación piensa que estás robando, pero el alcalde de Almadén no ha robado.
