Frederic Kanouté se queda en Sevilla para seguir con su plan de preparación, rehusando de este modo a disputar el amistoso que la selección de Mali afrontará mañana en París contra Burkina Faso. El delantero no ha jugado un solo minuto a las órdenes de Manolo Jiménez esta pretemporada.
El técnico quiere que su buque insignia debute este próximo fin de semana en el que será, junto al choque contra la Juventus en la Peace Cup, el partido más exigente de cuantos ha disputado el Sevilla en lo que va de pretemporada. Teniendo en cuenta, además, las dos derrotas cosechadas en el reciente triangular frente a Mallorca y Palermo, dar una buena imagen se antoja fundamental para la tranquilidad de todos. Sin ir más lejos, el propio presidente de la entidad, José María del Nido, ya comentó hace algunas semanas que el equipo debía comenzar a dar el nivel que se le presupone cuando afronte el Trofeo Carranza. Es decir, este próximo viernes ante el Valencia.
La decisión de que Kanouté continúe preparándose en la ciudad deportiva y no viaje a tierras francesas parece la más lógica, visto lo visto. Hasta el momento, sus días de trabajo con el grupo se cuentan con los dedos de una mano, ya que su estado físico se lo ha impedido. 'Nos preocupa, y bastante, aunque no tendrá que ser operado ni nada parecido, pero se está perdiendo tiempo de preparación. Por su musculatura, por su estructura ósea, Freddy no soporta dos entrenamientos seguidos al mismo ritmo de sus compañeros, se sobrecarga, aunque tenemos que estar tranquilos. Lo que sí tengo claro es que no le voy a forzar nunca. Le quiero tener listo para el día de Mestalla, nada más', explicaba Jiménez hace sólo unos días.
Kanouté fue convocado por su seleccionador para el amistoso que Mali disputará mañana miércoles en Francia contra Burkina Faso. Indiscutible en las filas del conjunto africano, el delantero del Sevilla tiene por delante una temporada cargada de partidos con su selección nacional. En este sentido, hay que recordar que Kanouté ya sufrió una lesión muscular jugando con Mali en los inicios de la pasada temporada y que le tuvo muchos días sin poder estar a disposición del técnico. Era el mes de octubre y su baja se sumó a las de Koné y Chevantón, en plena plaga de lesiones de futbolistas de ataque y desesperación de Jiménez.
Por todo ello, la idea del Sevilla es administrar aún más si cabe, casi a cuentagotas, a su buque insignia. Esta temporada, Kanouté espera disputar la Copa de África de selecciones, lo que supondrá una carga añadida de esfuerzo, pues mientras Mali certifica su clasificación al ariete le esperan tres competiciones como la Liga, la Liga de Campeones y la Copa del Rey.
Por eso, cuando se incorporó a la pretemporada, Kanouté se puso a las órdenes del preparador físico Sergio Domínguez y del fisioterapeuta José Amaya siguiendo un plan personalizado. Luego, la semana pasada, se unió al grupo y trabajó con aparente normalidad, aunque no fue incluido en la lista de convocados para el triangular de Palermo. Jiménez dejó claro con ello que el futbolista no está fino aún.
