¿Cómo ocurrió exactamente el atropello mortal de dos mujeres en el Paseo de Colón? La clave estará en el resultado de la autopsia a ambos cadáveres, ya que según el tipo y el lugar en el que se encuentren las lesiones determinarán si las víctimas fueron volteadas por el aire cayendo tras el coche o si por el contrario éstas se golpearon con el capó recorriendo varios metros sobre él.
Ésta parece la hipótesis más probable según explicó ayer a este periódico Sergio Fernández, técnico en accidentes de tráfico. Este especialista mantiene que la ausencia de frenada dificulta la reconstrucción, ya que "se desconoce el punto exacto" en el que se produjo el golpe y, por tanto, los metros que realmente fueron desplazadas las víctimas. "Tenemos el punto sólo por las declaraciones de los testigos, pero esto no es fiable al 100%. Sin la frenada es interpretar". Si el coche hubiera frenado el rastro que deja en el asfalto se interrumpiría en un punto, "que sería el lugar del atropello", señaló.
El hecho de que no haya frenada se puede deber a varios factores, "como que no las vio o incluso que la calzada o que los neumáticos estuviesen impregnados de cera". Las ruedas dejan la pintada en la carretera "por el calor" cuando se produce el frenazo, pero si debido a la Semana Santa "los neumáticos tenían cera, ésta es la que se derrite e impide que se marque en el suelo, por eso hay que revisar bien el coche". Sin embargo, Fernández cree que si no hay marcas es porque el conductor no las vio o "no tuvo tiempo de respuesta". El cerebro tarda unos "dos segundos y medio desde que recibe el estímulo hasta que reacciona", por lo que la respuesta efectiva dependerá de la velocidad.
Este experto cree que si una de las víctimas fue desplazada unos 37 metros (la otra 29), lo más probable es que hubieran recorrido esa distancia sobre el capó del vehículo y que cayeran al suelo cuando el vehículo comenzó a "desacelerar". Esto implica que el vehículo, un Renault Clio, iría circulando entre 60 y 100 kilómetros, "no más". Si el coche hubiera ido a más de 100 las dos chicas hubieran golpeado en el capó y luego en el parabrisas, impulsándolas hacia atrás. Pero entonces, lo más probable es que hubiesen sido desplazadas más de 100 metros. En cambio, cuando el atropello se produce a menos velocidad de los 60 kilómetros hora, "lo normal es que la víctima sea arrollada y el coche pase por encima".
Según Fernández, otro de los motivos para que un cuerpo sea volteado por encima del coche cuando éste va por debajo de los 100 kilómetros por hora es el peso de la víctima. "Habría que ver si las jóvenes se agarraron cuando vieron venir el coche, si una se cogió al brazo de la otra, y eso lo va a revelar la autopsia". Por ello el lugar en el que se encuentren las lesiones en los cadáveres serán determinantes, ya que aclararán la postura de los cuerpos cuando recibieron el impacto.
El técnico en accidentes de tráfico se decanta también por una velocidad inferior a 100 kilómetros por hora, "porque ya a 80 o 90 en ciudad la sensación de velocidad es muy alta". "Es poco probable que fueran a más 100 kilómetros por hora".
Otro de los elementos clave son los daños que presenta el coche. "El golpe es frontal y entre los faros, aunque habrá que ver si presenta alguno más hacia las esquinas", ya que según explicó Fernández "la inercia en un atropello es frenar o girar el volante para evitar el choque". El parabrisas del coche presentaba, además, una forma cóncava hacia dentro y estaba lleno de restos de cabellos, "lo que implica que los cuerpos impactaron ahí".
En cuanto a la posibilidad de que el autor -en prisión preventiva por dos delitos de homicidio imprudente- se fugara "es muy alta" porque recorrió más de 150 o 200 metros hasta parar. "Si hubiera frenado se hubiera parado en tan sólo unos diez metros", aseguró el experto.
