Local

La casa del gato

Cuando irrumpieron en los setenta, los Sex Pistols causaron una auténtica conmoción en el Reino Unido. Johnny Rotten, el líder del grupo, solía deambular por las calles de Londres con una camiseta sobre la que había garabateado un mensaje: yo odio. Con el pelo teñido de verde y los pantalones rotos, se abría paso entre la multitud de turistas asustando a la gente...

el 15 sep 2009 / 22:18 h.

Cuando irrumpieron en los setenta, los Sex Pistols causaron una auténtica conmoción en el Reino Unido. Johnny Rotten, el líder del grupo, solía deambular por las calles de Londres con una camiseta sobre la que había garabateado un mensaje: yo odio. Con el pelo teñido de verde y los pantalones rotos, se abría paso entre la multitud de turistas asustando a la gente. Nadie estaba preparado entonces para eso: el grupo fue denunciado en el Parlamento como una amenaza para el sistema de vida británico. A Rotten lo cogieron por la calle y le pegaron un navajazo, y otro miembro de la banda fue perseguido y golpeado con una barra de hierro. Al final, los Sex Pistols fueron prohibidos en todo el Reino Unido, se retiraron sus discos de las tiendas y se cancelaron todos sus conciertos.

Pero lo que un día resulta extraño, acaba siendo aceptado después y se convierte en algo común. Hoy ya nadie se sorprende de ver a gente con pantalones rotos, la cabeza rapada o el cuerpo lleno de tatuajes y perforado con piercings. Lo radical deviene en usual.

Con el arte contemporáneo sucede algo similar, que va dos o tres décadas por delante de la sociedad. Algunos (contados) artistas son la avanzadilla, e introducen prácticas y cuestiones que se harán habituales con el tiempo. Uno de ellos es Rirkrit Tiravanija, un artista que hace arte sin hacer objetos. En estos días inaugura dos nuevas exposiciones en España, una en el CAC de Málaga y otra en la Galería Salvador Díaz de Madrid.

En este último espacio, Tiravanija presenta La casa que el gato construyó, una réplica de su casa en Chiang Mai, Tailandia, construida con materiales precarios y reutilizables. En torno a la misma se celebrará el ciclo de conferencias ¿Es sostenible la sostenibilidad?, y el propio artista cocinará comida thai para todo el que desee asistir. Tiravanija es el representante más genuino de la estética relacional, cuya esencia consiste en la colectividad y en la interrelación entre personas. Su lugar en la historia del arte está asegurado.

  • 1