Corresponsabilidad es la palabra de moda en el discurso por la igualdad, pero la realidad se impone. Aunque los hijos son cosa de dos, el 93,1% de los trabajadores andaluces que cogieron una excendencia el año pasado para cuidar de ellos o de otros familiares fueron mujeres, frente a un 6,9% de hombres.
Durante 2007, un total de 4.438 andaluces pidieron un tiempo de parón en su puesto de trabajo para dedicarse al cuidado de menores u otros familiares. De ellos, 4.132 fueron mujeres y sólo 306 hombres. La diferencia en la proporción es clara y generalizada en todo el territorio nacional. De hecho, si en el ámbito andaluz la proporción de hombres fue de 6,9% frente al 93,1% de mujeres, el total nacional es del 5,7% de hombres (2.327) frente al 94,3% de mujeres. A la luz de estos datos del Ministerio de Trabajo queda claro que el peso de la familia recae aún en las mujeres, una situación que explica algunas de las dificultades de las trabajadoras para integrarse en el mercado laboral o hacerlo en igualdad de condiciones que los hombres. De hecho, una investigación reciente del Centro de Estudios Andaluces reveló que una de cada tres andaluzas considera que la maternidad puede ser un obstáculo en su trayectoria profesional, con resultados similares entre las empleadas del sector público y las de empresas privadas.
No obstante, los datos del Ministerio de Trabajo muestran cierta evolución en este sentido. En 2005 el porcentaje de hombres que solicitaban excedencias por cuidado de un familiar suponía el 5,5% del total, cifra que en 2006 sólo se elevó hasta el 5,8%. En 2007, año en el que entró en vigor la Ley de Igualdad que amplió el alcance y duración de esta prestación, hubo un salto cuantitativo de un punto en el camino hacia la igualdad.
Al margen de este tipo de excedencias, en el primer trimestre de este año la Seguridad Social ha tramitado en Andalucía 16.351 prestaciones por maternidad -un 10,92% más que en el mismo periodo del año pasado- con un gasto total de casi 64 millones de euros. Aunque la ley permite que este permiso sea compartido por ambos progenitores, sólo 167 hombres se acogieron a esta posibilidad. El 98,98% de las bajas maternales fueron disfrutadas exclusivamente por las mujeres y un 1,02% fueron compartidos por madres y padres. En todo el país, se concedieron 87.677 permisos -1.280 de ellos compartidos-, con un gasto de 388,7 millones de euros.
Aunque la proporción de permisos compartidos es aún muy baja, Andalucía es una de las comunidades en las que ha aumentado el número de padres que se acogen a esa opción, frente a un descenso generalizado. También creció esta tendencia en Aragón, Baleares, La Rioja y, sobre todo, Extremadura.
