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La misteriosa mujer del pantano

El suceso trae de cabeza al grupo de investigación de la Guardia Civil. Como si se la hubieran tragado las aguas del pantano en el que fue encontrada sin vida, la identidad de esta misteriosa mujer sigue sin conocerse, algo que deja en punto muerto la investigación para esclarecer las causas del suceso.

el 15 sep 2009 / 10:41 h.

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El suceso trae de cabeza al grupo de investigación de la Guardia Civil. Como si se la hubieran tragado las aguas del pantano en el que fue encontrada sin vida, la identidad de esta misteriosa mujer sigue sin conocerse, algo que deja en punto muerto la investigación para esclarecer las causas del suceso.

A ciencia cierta, sólo se sabe de ella lo que físicamente se ve: que tenía el pelo de color castaño claro, que sus ojos eran azules, que podría tener entre 40 y 60 años, que era de complexión gruesa y que medía alrededor de 1,65 metros. Sin embargo, la Benemérita desconoce hasta si su nacionalidad es española. Lo cierto es que nadie ha denunciado su desapariciónm, con lo que un halo de incertidumbre rodea desde el 19 de agosto este caso producido en Torre del Águila, un pantano de la Entidad Local Autónoma (ELA) de El Palmar de Troya, perteneciente al término municipal de Utrera.

Tras conocerse la noticia, los vecinos de la zona recibieron con sorpresa el trágico suceso. Y es que, como relata el alcalde palmareño, Manuel García, "nunca había ocurrido nada así, y mucho menos de esta forma tan extraña". Los habitantes del entorno sí recuerdan cómo, hasta hace algo menos de 10 años se producían muertes esporádicas en el interior del pantano, ya que las personas perecían ahogadas allí. "Mucha gente utilizaba la presa como una playa y no tiene nada que ver, porque aquí hay muchos hoyos y maleza que puede producir un traspiés o un mal movimiento y provocar la muerte", señala García.

Tanto es así, que el regidor de El Palmar recuerda el fallecimiento de entre una y dos personas cada año. Ante esta situación, y debido también a los vertidos que se producían en las citadas aguas, procedentes de El Coronil y Montellano, las autoridades optaron por prohibir el baño en el recinto natural.

Sin embargo, lo que a Manuel García -y a los vecinos del lugar- le extraña es que la mujer fallecida estuviera sola en el pantano, sin más compañía. Y es que nadie vio nada. El día en que apareció el cadáver de la víctima, un hombre que pescaba en su pequeña embarcación avistó el cuerpo y se lo comunicó al funcionario de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, que permanece en dicho enclave durante todo el día.

También la Guardia Civil reconoce que es un caso muy raro, pues en el lugar del suceso no se ha encontrado ningún vehículo o medio de transporte que haya podido utilizar la mujer para llegar al paraje, a pesar de que el pantano se encuentra retirado de los núcleos poblacionales.

Lo más llamativo de la historia es que nadie ha denunciado la desaparición de una persona de estas características. Desde que se conoció el suceso se ha producido alguna llamada, como la de una chica de Córdoba que escuchó la noticia, pero que no tenía nada que ver con su caso. Mientras, los agentes continúan analizando las denuncias existentes en todo el país, para intentar lograr identificar a la víctima. Todo lo necesario para no tener que archivar el caso de la misteriosa mujer del pantano.

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