Con una inversión de 30 millones de euros, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) pone en marcha el Plan Hidra con el que se busca modernizar y optimizar la gestión del organismo.
Con esta iniciativa, según explicó la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, se aplicará el nuevo Plan Hidrológico en lo referente a la calidad de aguas, gestión medioambiental y mejora del dominio público hidráulico. Además, remarcó en varias ocasiones que se abrirán actuaciones olvidadas por la anterior gestión, en manos de la Junta de Andalucía durante tres años.
Por su parte, el presidente de la CHG, Manuel Romero, antes de adentrarse en los pormenores del Plan Hidra, explicó que el nombre de la iniciativa se ha tomado de la figura mitológica Hidra de Lerna, la serpiente policéfala de 10 cabezas, los mismos objetivos que se ha fijado este nuevo plan, que es extraordinario y temporal, con una duración de dos años.
Las diez cuestiones en las que se incidirá con esta inyección económica son la puesta al día en el área de calidad, donde se invertirán 4 millones de euros para el desarrollo de controles biológicos, hidromorfológicos y físico-químico en las aguas continentales y subterráneas de toda la cuenca. Se actualizará también el área de gestión medioambiental, que contará con una partida de 2,5 millones para, entre otras cuestiones, elaborar mapas de peligrosidad y riesgo. Asimismo, se trabajará en la mejora, protección y recuperación del dominio público, donde ya se han invertido 9,4 millones y se prevé destinar otros 4,8 millones. También se dará un impulso a la tramitación de expedientes, ya que, según Romero, hay 35.000 documentos que están sin resolver, un problema histórico en la CHG y para lo que se emplearán 7 millones de euros. La meta es reducir a la mitad este bloqueo y para ello se externalizará el servicio, aunque, el presidente de la CHG, insistió en que esta asistencia técnica siempre se realizará bajo la supervisión de los funcionarios de la confederación.
En esta misma línea, en el plan se incluye el desbloqueo de los expedientes recurridos ante la Junta y que ésta no ha contestado. Además, se prevén introducir nuevos criterios de gestión para agilizar y simplificar el procedimiento administrativo en cuanto a las concesiones de dominio público hidráulido y de pozos, así como el inicio de expedientes de deslindes del dominio público hidráulico.
Otro de los puntos a los que Romero concedió mucha importancia es la oficina de atención al público de la Comisaría de Aguas, que permite ofrecer una atención personalizada, y donde en pocos meses ya se han atendido 4.000 consultas, según detalló.
El octavo objetivo de este Plan Hidra es la regularización y retomar los trámites concesionales, se regularán en toda la cuenca y de forma muy especial en las zonas más sensibles como son el entorno del Parque Natural de Doñana, la Loma de Úbeda, la zona arrocera o los riegos en Guadajoz, para ello se ha destinado una inversión de 1,2 millones de euros.
Finalmente, también se iniciará el proceso para que todas las grandes comunidades de regantes se inscriban en el registro de aguas, adecuando, además, las dotaciones de los particulares y pequeñas comunidades de regentes al nuevo Plan Hidrológico. El presidente de la CHG admitió que en la actualidad sólo está inscrita una comunidad de regantes: la del Bajo Guadalquivir. En definitiva, según recalcaron Crespo y Romero, que lo que se busca con el Plan Hidra es mejorar la eficiencia y la gestión de la CHG, agilizando su funcionamiento e impulsando la intervención directa para la resolución de conflictos históricamente heredados, una situación de la que culparon en buena parte a la Junta de Andalucía.
