Camarero, socorrista, agricultor, dependiente de El Corte Inglés o cajero de FNAC. Son algunos de los empleos de los líderes de Nuevas Generaciones en Andalucía. Quieren desterrar el tópico de que son niños de papá y vienen pisando fuerte para dar "frescura" al ideario del PP.
Tienen entre 23 y 27 años, saben lo que es el trabajo y aseguran que la vida nunca les ha regalado nada. Acaban de ser elegidos presidentes de NNGG en los congresos que se han celebrado en cada provincia andaluza. El PP ha aupado estratégicamente a jóvenes con un perfil que muy pocas veces se asocia a este partido para desterrar una imagen "errónea" que les "pesa".
"Nosotros no somos niños pijos". Lo dice José Luis García (Pepelu, para sus amigos), líder de la organización juvenil en Sevilla. Hasta la semana que viene -que acaba su contrato- se le puede encontrar por las mañanas en FNAC. Vive en Parque Alcosa y su padre es obrero. Es diplomado en Relaciones Laborales y ahora cursa Ciencias Políticas en la Olavide. Desde los 18 años ha trabajado para pagarse los estudios. "He tenido tantos empleos...Estuve en un burger, en Decathlon y ahora de cajero en FNAC", cuenta. Siempre le han gustado -dice- los temas sociales, por eso colabora con Cruz Roja Juventud y echa una mano en los centros de refugiados. Se afilió en 2002 a NNGG porque consideró que el PP "es el partido que puede solucionar los problemas reales de la gente".
El currículum de José Luis no es una excepción entre los nuevos líderes de NNGG. Todos trabajan o han trabajado para costearse los estudios o los gastos diarios. Y es que no cobran por el cargo al que acaban de acceder. Roberto Moreno (23 años) vive de lunes a viernes en Jaén, donde cursa Filología Hispánica, y los fines de semana se va a su pueblo, Torres, a trabajar en el campo. Ahora está con la recolección de la aceituna, pero luego pasará a otra campaña. "Mi familia recolecta y yo siempre he arrimado el hombro. La vida nos la pagamos con nuestro trabajo", señala. El secretario general de NNGG en Jaén, Manuel Heras, también es universitario y empleado en el mercado de mayoristas. "Nosotros compartimos la ideología esencial con el PP, pero venimos a dar frescura", explica Roberto.
El ejemplo de que traen ideas renovadas es que defienden el matrimonio homosexual -el PP está en contra de llamar matrimonio a estas uniones- y a ninguno le sorprende que el líder de NNGG de Almería, Carlos Sánchez -asesor en el Ayuntamiento de Almería-, haya declarado públicamente que es gay. "La organización es, ni más ni menos, un reflejo de la calle", insisten los jóvenes dirigentes.
En política. Luis Verde, presidente de NNGG de Málaga, asegura que los jóvenes "comparten las ideas esenciales del PP" pero que sus inquietudes son "distintas". Este malagueño se ha costeado Derecho con el sueldo de dependiente de El Corte Inglés y ahora oposita al Cuerpo de Administradores Civiles del Estado (antiguo TAC). Juan Francisco Gutiérrez, responsable de la formación en Granada, rechaza las "etiquetas". "Yo he trabajado mucho tiempo de camarero, con promociones y, además, soy ecologista, algo que parece patrimonio de la izquierda", afirma. Su razón para afiliarse: "En 2004 me dio mucho coraje la persecución al PP".
Las únicas que repiten en el cargo son las dirigentes de NNGG de Córdoba, Beatriz Jurado; y Cádiz, Carmen Sánchez. Las dos tienen experiencia en política. Beatriz, que estudió Derecho e hizo un Erasmus en Noruega, iba en las listas del PP en las pasadas municipales. Carmen, la mayor de los ocho (27 años), es concejal en el Ayuntamiento gaditano. Completa el equipo Iván Garrido (Huelva), que insiste en que NNGG viene a "reavivar la esencia del PP, que debe estar con este tiempo."
