La ceremonia de entrega de los premios Goya, emitida por La 1 de TVE, fue vista este domingo por 4,1 millones de espectadores (el 23,3% de la cuota de pantalla), el tercer mejor dato de las últimas dos décadas, por detrás de los resultados logrados en las galas de 2010 y 2011, con Andreu Buenafuente como maestro de ceremonias, según un informe elaborado por Barlovento Comunicación con datos de TNSofres.
De esta forma, la gala, en la que 'No habrá paz para los malvados' de Enrique Urbizu se ha proclamado como la gran triunfadora, queda, en cuestión de audiencia, por detrás de las ceremonias presentadas por Buenafuente en 2011, que obtuvo 4,3 millones de espectadores (25,4% de la cuota de pantalla), y en 2010, con 4,6 millones de espectadores (26,4% de la cuota de pantalla), pero supera al resto de galas emitidas desde 1994.
La gala de 2009, presentada por Carmen Machi, logró 3,3 millones de espectadores (20,8%); mientras que las galas que presentó José Corbacho, en 2007 y 2008 lograron 3,2 millones de espectadores (20,5%) y 2,7 millones de espectadores (18,1%), respectivamente. En general, exceptuando las tres últimas galas que han marcado un record en el histórico, la audiencia de las ceremonias de entrega de los Goya suele rondar desde 1994 los 3 millones de espectadores, aunque el interés por los premios ha variado estos años.
La ceremonia que menos interés ha despertado en la audiencia televisiva estos últimos años fue la del año 2004, en la que la película de Iciar Bollaín 'Te doy mis ojos', resultó galardonada con el Goya a Mejor Película. En esa ocasión, 2,1 millones de personas vieron la gala (el 20% de la cuota de pantalla). Mientras, la ceremonia más vista fue la de 2010, en la que 'Celda 211' se hizo con el galardón a Mejor Película ante 4,6 millones de espectadores (el 26,4% de la cuota).
'No Habrá Paz Para los Malvados' fue la gran triunfadora de la 26 edición de los Premios Goya al alzarse con seis de los catorce galardones a los que aspiraba. En una noche muy igualada entre las principales favoritas, la cinta de Enrique Urbizu se ha impuesto al resto en un potente sprint final en el que se ha llevado además las categorías más importantes: Mejor Interpretación Masculina (José Cornado), Mejor Dirección (Urbizu) y Mejor Película.
