El subinspector de Policía a cargo de la Oficina de Extranjería de Almería, detenido por su presunta implicación en una trama que estafaba a inmigrantes cobrándoles para agilizar los trámites de su documentación, declaró ayer que nunca hizo nada "que no hicieran y supieran desde el escalón más bajo hasta el más alto" de la administración.
Fuentes judiciales informaron a Efe de que el subinspector, de 61 años, llegó a asegurar que, desde el comisario de Almería hasta el subdelegado del Gobierno, Miguel Corpas, conocían las prácticas por las que él ha sido detenido e imputado, que consideró como "vicios" propios de la administración más que como acciones punibles penalmente, una versión que corroboraron otros dos agentes detenidos que trabajaban junto al anterior en la Oficina de Extranjería.
Tras las declaraciones desarrolladas entre el jueves y ayer, el titular del juzgado de instrucción 6 de Almería dejó en libertad bajo fianza de 6.000 euros a ocho de los doce detenidos en esta presunta trama (a uno de los agentes se le ha rebajado a la mitad al alegar dificultades pare reunir el dinero), mientras que el inspector jefe de la Brigada de Extranjería y Documentación -arrestado a última hora del jueves y que fue el primero en declarar- ha sido puesto en libertad sin cargos. Otros tres detenidos quedaron libres tras declarar en Comisaría.
Además de los policías, están imputados por cohecho en esta causa dos trabajadores interinos de la Oficina de Extranjería de Almería. un trabajador de la Agencia Tributaria de El Ejido y el dueño y el suelo de una gestoría ejidense. Los tres que quedaron en libertad tras su paso por Comisaría son el hijo y la nuera de uno de los policías imputados y un funcionario del Ministerio de Administraciones Públicas.
