Jorge Molina tiene patente que el objetivo es uno y claro: el ascenso. Fuente: EDD
Jorge Molina cumple la quinta temporada en el Betis y transmite la misma ilusión que desde el primer día. Su mirada desprende la alegría por el nacimiento de su primer hijo, la seriedad por la responsabilidad y el orgullo que para él representa ser el capitán del conjunto verdiblanco, al que espera devolver a Primera, al tiempo que agradece a la afición el cariño que le tiene. Además, no tiene prisas por tratar el tema de su revisión de contrato (acaba en 2016) y entiende que el club le dé más importancia, ahora, a los fichajes y las salidas, aunque espera que éste le reconozca el esfuerzo que ha hecho por seguir en un Betis, en el que ha demostrado ser un gran profesional, tanto dentro como fuera del terreno de juego. Por eso, el de Alcoy es el capitán modélico de Heliópolis.
¿Cómo lleva usted el asunto de la revisión y mejora de contrato? Todavía está pendiente, pero no es una cosa que me preocupe, excesivamente. Mi representante vendrá a hablar con Alexis cuando éste tenga disponibilidad, pues entiendo y es lógico que en estos momentos lo primordial sean los fichajes y las salidas. Insisto, no ha habido nada y no es una cuestión que ahora me preocupe demasiado.
Además, Rubén está enchufadísimo... Está muy bien. Al final llega a tope al inicio de la Liga, como todos los años. La pasada temporada tuvo el problema de la lesión y eso le impidió hacer una buena pretemporada, y después estuvo mucho tiempo parado y lo notó. El resto de años siempre estuvo bien, como se encuentra ahora. Estamos acostumbrados a verlo así. Eso es positivo.
Y cinco años después, Jorge Molina y Rubén Castro... Llevamos cuatro años ya. Ésta es el quinto, volvemos a Segunda División y ojalá tengamos el mismo final que la otra vez y podamos conseguir el ascenso al final de la temporada. Éste es el objetivo que tenemos marcado.
Parece que fue ayer cuando le marcó al Levante, en Valencia, aquel magnífico gol que clasificó al Betis para la Europa League, y ahora el equipo se encuentra, de nuevo, en Segunda División... La situación es totalmente diferente en todos los aspectos. Institucionalmente, deportivamente... Al final, lo deportivo es lo principal y el año pasado nos ganamos el descenso. La última temporada fue mala y ahora tenemos que apechugar y ascender al equipo, que en Primera es donde tiene que estar.
¿No echa en falta un poco de estabilidad en el club? Algún año sí que la hubo. El primero, en Primera, el segundo y el tercero mío que al final nos metimos en Europa... Ése año fue muy bueno y tranquilo. La temporada pasada sí que hubo un poco más de jaleo y al final todo eso acabó influyendo, pero ahora es el momento de apretar y sacar a este equipo de Segunda.
El Betis en Segunda, pero la afición lo quiere y se lo ha demostrado... Sólo puedo tener palabras de agradecimiento hacia los béticos. Sobre todo, por el año pasado. En los últimos partidos era normal que la gente estuviera defraudada y caliente por el descenso, pero aunque culpables éramos todos ellos me aplaudieron. Eso es algo que hace que tenga más ganas aún de seguir trabajando y peleando para responder en el campo, que es lo que quieren ellos.
Y con lo que significa ahora que usted sea el primer capitán del equipo... Los cuatro que estamos servimos, al final, un poco de apoyo para todo el mundo y para ponerles las pilas a la gente, cuando la situación lo requiera. Asumimos un poco más de responsabilidad, pero al final ser capitán de un club con tanta masa social e historia es un orgullo para mí.
Jorge Molina, Rubén Castro, Adán... ¿Estáis ustedes llamados a tirar del carro? Al final, cada uno tiene que asumir su parte de responsabilidad en el equipo. Los jóvenes porque tienen que demostrar cosas todavía, y los veteranos porque tenemos experiencia y tenemos que seguir luchando y peleando. Entre todos tenemos que poner el granito de arena para intentar lograr el objetivo.
¿Cómo va asimilando la plantilla la idea de juego de Julio Velázquez? La estamos adquiriendo poco a poco. Queremos tener varios sistemas y formas de jugar para ver en cada momento cuál es la mejor. Creo que eso es importante, pues durante los partidos siempre se dan muchas situaciones.
Parece que la relación entre los jugadores y el entrenador también es buena... El míster está muy encima de nosotros. En todos los entrenamientos quiere que la gente esté muy implicada, y eso es muy positivo. Hay un buen grupo, buen ambiente y todo eso se refleja luego en el terreno de luego.
Y competencia hay. Para su puesto ha llegado Rennella... Siempre es positivo porque al final la competencia es buena. Eso hace que te exija más entrenando. En ataque hay más alternativas y podemos jugar juntos en ataque también. Que haya competencia en todas las posiciones es beneficioso para el equipo.
Por último, ¿qué mensaje le manda a la afición? A nuestros aficionados les digo que vamos a trabajar y hacer todo lo posible para que semana a semana vayamos sumando los puntos de tres en tres y se sientan orgullosos de nosotros. Queremos darles alegrías después de todo lo que vivieron el año pasado.
