La Delegación de Movilidad limitará el debate sobre la revisión de la ordenanza municipal que regula el sector del taxi a cuestiones que afecten directamente a la prestación del servicio y a las posibles infracciones que se cometen. Desde este área descartan introducir una negociación sobre el número de licencias, como demandan las dos asociaciones mayoritarias.
Los taxistas defienden que este proceso sirva para limitar el número de licencias a unas 1.500 -un 30% menos que ahora-, lo que no se aplicaría directamente sino que sería objetivo a largo plazo. Pero Movilidad ya ha respondido: no se darán más pasos que el plan de modernización que prevé el rescate de 15 licencias al año.
La asociación de consumidores Facua se mostró partidaria de que se revise el número de licencias en el marco del debate sobre la ordenanza, aunque nunca a la baja. "Una reducción mermaría la calidad del servicio, aunque se podría plantear un aumento de determinadas licencias de doble turno que cubran las carencias del servicio nocturno", apuntó el portavoz de la asociación, Rubén Sánchez, quien instó también a reforzar la capacidad inspectora.
Movilidad inició ayer la ronda de contactos con una reunión con la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos, Unidad.
