Los familiares de un enfermo que falleció hace un mes en el hospital Carlos Haya de Málaga han denunciado a varios miembros de la dirección del centro por un delitos de omisión del deber de socorro y de homicidio imprudente.
Según los denunciantes, el paciente, de 59 años de edad y afectado por una trombosis, murió tras permanecer ingresado 33 días "esperando a que le operaran". El hijo del fallecido, David Valadez, explicó que su padre, que residía en Estepona (Málaga), "fue ingresado en el hospital comarcal de la Costa del Sol de Marbella y allí permaneció seis días hasta que le diagnosticaron una fístula arteriovenosa dural occipital provocada por una trombosis". Posteriormente fue trasladado al Carlos Haya de la capital malagueña, donde estuvo 33 días en espera de una intervención quirúrgica "hasta que falleció el pasado 4 de noviembre".
La denuncia fue presentada en el Juzgado de número 3 de Málaga contra el subdirector del centro, el jefe del servicio de neurocirugía y el jefe del servicio de radiología vascular. Valadez indicó que durante los once primeros días de ingreso de su padre "no le hicieron ninguna prueba previa a la embolización que le debían realizar, e incluso lo llegaron a tener hasta en tres ocasiones en ayunas para después no hacerle nada porque no lo tenían en lista de espera".
Finalmente la operación se canceló "minutos antes de iniciarla", relata el hijo del fallecido, porque debía haber dejado de tomar uno de los medicamentos ocho días antes de la intervención quirúrgica. Después, el enfermo sufrió una crisis epiléptica y un cuadro de infecciones hospitalarias.
