El tiempo de espera para coger un autobús que le lleve o le traiga de la Feria estará en torno a los "ocho o nueve minutos" si los trabajadores de Tussam llevan a cabo finalmente la huelga convocada. Son las cuentas que hace el concejal de Movilidad, Francisco Fernández, que ayer vaticinó que "habrá dificultades pero no caos" si la huelga no se desconvoca.
Fernández admitió que los servicios mínimos, que serán del 50% en las líneas de Feria, "no cubren la demanda con eficacia", y aclaró que el tiempo de espera en el Prado y en la Feria será el doble que el año pasado, cuando se cifró en cuatro minutos.
Sin agenda. Aunque en estos momentos no hay establecido en la agenda ningún nuevo encuentro entre empresa y trabajadores, el edil dio por segura le celebración de alguna reunión previa a la celebración de la Feria de Abril para intentar a última hora la desconvocatoria de la huelga. Fernández apeló a la importancia de la Feria de Abril para la economía de la ciudad y expresó su deseo de que, finalmente, no haya huelga. No obstante, dijo, "tenemos que pensar no sólamente en la Tussam del lunes del pescaíto sino en la Tussam de dentro de unos años, que está claro que tiene que ser de titularidad pública".
El concejal de Movilidad insistió en la necesidad de que haya "un compromiso de salvar la empresa por parte de la propia plantilla", a lo que añadió que si no se dan las condiciones que la empresa está poniendo sobre la mesa, como es el caso de la externalización de algunas líneas, "no se resuelve el problema". Eso sí, aclaró que el concurso iniciado con este fin está parado a la espera de que se alcance un acuerdo sobre el plan de viabilidad. "Si tenemos la intención de salvar Tussam a largo plazo hay que reducir gastos fijos", reiteró Fernández, quien concluyó que "en la propuesta de los trabajadores no hay ninguna aportación por su parte" y les pidió "un compromiso y una actitud de voluntad real de salvar la empresa".
